«Intestinal» y «bajo presión»

«Estoy rodando con mucha presión. La crisis también se nota en el cine. Estamos pillados, como siempre, trabajando a lo bestia y sacándole el jugo al día» se desahoga Álex de la Iglesia en un descanso del rodaje de su película «mas intestinal». La ha escrito sólo, sin la habitual colaboración de Jorge Guerricaecheverría, de modo «que deja ver mi mal disimulada psicosis». Dice llevar con «normalidad» la duplicidad que supone presidir a sus colegas y no dejar el oficio. «El día 14 estaré en la entrega de los Goya, pero al día siguiente, a las ocho, me veréis en set y gritando acción». Donde no podrá, por ahora, dar el primer golpe de claqueta, es en 'La marca amarilla' uno de sus proyectos «más ambiciosos».

Basado en el cómic 'Blake & Mortimer' del belga Edgar P. Jacobs, y protagonizada por Hugh Laurie, el doctor House, se ha visto obligado a aparcarlo, pero al que no renuncia. «Como siempre ha sido 'todo por la pasta', como la peli de Urbizu, pero seguimos trabajando en ello», se resigna. «Es compleja y difícil pero la haremos» promete. «Ya tenía el sí de Kiefer Sutherland y estaba todo a punto cuando tuvimos que desistir». «Va siendo un clásico que yo tenga grandes proyectos atascados. Pero insisto, haremos esta peli igual que haremos 'Fu Manchú'» dice aludiendo a otro de sus proyecto por ahora frustrados.