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«Ni las renovables son de izquierdas ni la energía nuclear es de derechas»
Manuel Lozano Leyva Catedrático de Física NuclearEl Club de Roma invitó al experto a disertar sobre la necesidad de implantar un nuevo modelo que combine diversas fuentes energéticas
Actualizado: GuardarA estas alturas, nadie duda de que el uranio vuelve a estar de moda. La energía nuclear vive su particular renacimiento y los gobiernos de todo el mundo, conscientes de que el petróleo tiene los años contados como principal fuente de energía, han vuelto sus miradas hacia esta opción para generar electricidad. Manuel Lozano Leyva, director del Departamento de Física Atómica, Molecular y Nuclear de la Universidad de Sevilla, miembro del CERN e investigador, defiende la vigencia de este modelo y considera que a la energía nuclear «se la ha demonizado con argumentos de escaso valor científico».
-Sus razones para apostar por la energía nuclear no son sólo económicas, también ecológicas.
-Sí, pero no sólo. Que la energía nuclear es más limpia y competitiva que el petróleo es indiscutible, pero es que permitiría que España dejara de depender del gas argelino y el petróleo de Oriente Medio.
-Entonces, ¿por qué sigue teniendo tan mala prensa?
-Por desinformación. En los años que llevamos produciendo energía nuclear en España, el número de afectados es cero. No digamos heridos o muertos. Ninguno. En Reino Unido suele decirse que la central de carbón de Didcot ha producido muchísimos más muertos que Chernóbil.
-No resulta fácil olvidar las consecuencias de aquella catástrofe.
-Hay quien piensa que si algo sale mal en algún reactor el cielo va a llenarse con el temido hongo nuclear. Eso es falso. Físicamente imposible. Ni siquiera la intervención humana, por error o terrorismo, podría provocar un accidente serio.
-En su libro 'Nucleares ¿Por qué no?' asegura que criticar la energía nuclear es apoyar al petróleo.
-Evidentemente. El mensaje que transmiten los antinucleares es 'queremos petróleo, carbón y gas'. Y ese es un modelo que parece agotado. Como, hoy por hoy, sostener el suministro energético de un país como España sólo con renovables es una utopía, lo más sensato parece combinar todas las posibilidades. Las nucleares no contaminan, sus efectos para la salud son mínimos y conocidos, los residuos que genera permanecen localizados y controlados... Son muchas más las ventajas que los inconvenientes.
-Entonces, ¿por qué se opone Greenpeace a una energía que, según usted, no contamina?
-Me imagino que se refiere a Greenpeace España. Greenpeace de Francia tiene otra actitud, lo mismo que Greenpeace de Reino Unido. No diré nombres, pero conozco a líderes de movimientos ecologistas que se muestran favorables .
-¿Por qué ser antinuclear parece propio de gente de izquierdas y pronuclear de gente de derechas?
-La identificación de las nucleares con la derecha ocurre sólo en este país. La energía nuclear es la única industria que está controlada por el Parlamento mediante el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).