Cristiano desatasca y luego se pierde
La afición blanca empezaba a silbar en el Bernabéu hasta que apareció la estrella lusa, que una vez sentenció vio la roja por agresión El portugués se reencuentra con el gol y se autoexpulsa en otro partido muy gris del Real Madrid
MADRID.Actualizado:Cristiano Ronaldo es mucho en este Real Madrid. El único futbolista que anima a ver al equipo y capaz de decidir por sí solo, más para bien que para mal, aunque al igual que le ocurrió frente al Almería, Cristiano también se encargó de sacar la cruz ante el Málaga. Gracias al portugués, el Madrid cerró la primera vuelta de la Liga con pleno de victorias en el Bernabéu y a cinco puntos del Barça. Después de tres jornadas sin marcar, Cristiano se reencontró con el gol, por partida doble, y fue quien desatascó a su equipo y sentenció cuando la afición madridista asistía a otro pobre espectáculo de su equipo. Después, el jugador con tantas ganas de jugar y agradar se perdió con su autoexpulsión en otro partido muy gris del Madrid frente a un Málaga que fue de más a menos.
Cuando se escuchaban pitos en el Bernabéu, el Málaga acababa de perdonar tres ocasiones seguidas y Casillas había tenido que despejar incluso con la cabeza desde la frontal del área, tres minutos le bastaron al Madrid, más bien al futbolista más caro de la historia, para recuperar la tranquilidad. Con una jugada a primer toque entre Benzema, Kaká y Cristiano, culminada por el portugués en la posición de delantero centro, y un genial remate del 'crack' desde fuera del área, con todo el camino libre, que arruinó el entonces gran trabajo defensivo del Málaga. La jugada del gol que abrió el marcador fue la primera, y casi única, en la que los de arriba demostraron movilidad. Hasta entonces, sólo Guti, por primera vez titular desde el desastre de Alcorcón, había puesto a prueba a Munúa y el Madrid era incapaz de salir del embudo, pese a los intentos del brasileño Kaká, que sigue sin funcionar en un equipo sin extremos.
El partido comenzó tan mal para el Madrid que Casillas debió salvar en la línea un cabezazo hacia atrás de Xabi Alonso que se estrelló en el larguero cuando el donostiarra intentaba despejar un remate de Duda, que puso en muchas dificultades a la defensa blanca. Con aglomeración de jugadores del Málaga en el medio campo, el Madrid, otra vez excesivamente lento, sin profundidad, y Lass y Xabi juntos sin la compañía de Marcelo, que se cayó del once, no encontraba la salida. Intentaba disponer del balón, pero el Málaga mantenía el tipo, y con algo de pegada arriba los de Muñiz habrían dado un disgusto antes de la media hora de partido. Los blancos fueron cayendo en una situación de apatía peligrosa y no sólo dejaron de pisar el área contraria, sino que empezaron a pasarlo mal en defensa. Hasta que Cristiano decidió que era el momento de acabar con tantísimas dudas.
Cal y arena
Caminaba el partido por una fase insulsa cuando Cristiano se encargó otra vez de animarlo. Agarrado por Mtiliga en su propio campo, al portugués se le volvió a ir la cabeza como le ocurrió ante el Almería. No podía zafarse Cristiano del defensa y soltó un primer codazo atrás, hasta que el segundo impactó con fuerza en la cara del danés. Dejó a su equipo con diez más de 20 minutos por jugar. Sin embargo, no hubo emoción porque el Madrid no se dejó sorprender. Intentó dormir el partido y le salió bien. Para algo están la clase y la experiencia, aunque el aburrimiento fue insoportable.