El Supremo elimina los límites a la financiación empresarial de las campañas
WASHINGTON. Actualizado: GuardarEl Tribunal Supremo de Estados Unidos decidió ayer eliminar los límites a la financiación de campañas electorales por parte de corporaciones empresariales y sindicatos impuestas en 1990 y 2003. Este dictamen, tomado por cinco votos contra cuatro, supone una nueva derrota de la Administración Obama y de los activistas que defendían la regulación, para quienes el cese de estas restricciones puede derivar en demasiada influencia de las compañías sobre los resultados electorales. El fallo podría repercutir en las legislativas de noviembre.
El juez Anthony Kennedy argumentó que estas barreras violan los derechos constitucionales de libertad de expresión. La mayoría conservadora del tribunal había propuesto con anterioridad eliminar algunas partes de esta ley, diseñada para regular el papel del dinero en la política y para prevenir la corrupción. Los cuatro miembros liberales se mostraron en contra. El presidente, a través de un comunicado, también mostró su desacuerdo con la sentencia. «Ésta es una victoria enorme para las petroleras, los bancos de Wall Street, las compañías de seguros de salud que movilizan su peso cada día para ahogar las voces del ciudadano común», señaló Obama.
La decisión sí mantiene vigente el requisito de divulgación por el cual las empresas que gasten más de 10.000 dólares -7.100 euros- anuales en la producción o difusión de propaganda deben informar a la Comisión Electoral Federal, indicando los nombres y direcciones de las personas que hayan aportado más de 1.000 dólares -700 euros-.