LAS LETRAS DEL CARNAVAL
Actualizado: GuardarAcaban de terminar, como aquél que dice, las fiestas de Navidad y Cádiz comienza a prepararse para su fiesta grande, el Carnaval. Desde el pasado viernes, 15 de enero, la actividad cultural de la ciudad gira entorno a la plaza de Fragela, al Teatro Falla. A partir de ahora y hasta mediados de febrero éste será el epicentro. Todos los medios de difusión, televisión, prensa y radio, tienen destacados allí sus equipos para llevarnos a todos lo que allí va a ir presentándose. Mientras, fuera, la ciudad sigue su curso, a otro ritmo, pero sigue.
El Carnaval, a través de sus agrupaciones y de sus coplas, va a medir -como cada año-, el pulso de la ciudad, va a ser la expresión pública del sentir popular. Quizás a veces no valoramos totalmente sus denuncias y otras, las más, sirven para levantar los aplausos o los 'olés' del respetable, pero para poco más. Al Falla acuden, cada noche, muchos políticos y allí reciben desde el escenario las quejas que el pueblo, el pueblo llano, hace de su gestión. Muchas veces estas críticas vienen salpicadas de ingenio y buen humor pero otras son directas a la yugular, pero ellos, impasibles, aguantan el tirón y cuando salen a la calle, nada, todo olvidado. Es cierto que en otras ocasiones las letras son demagógicas y se escriben para ganar un aplauso fácil pero la mayoría dejan algo en su trasfondo que debería hacer pensar a más de uno.
Se ha dicho que el Carnaval, a través de sus letras, es el diario vivo de la ciudad. Yo diría más, las letras deberían servirle a muchos para detectar cuál es el sentir popular y analizarlas, porque algunas están cargadas de razón. ¿No se deberían tenerlas más en cuenta? Todos ganaríamos.