Mariano Rajoy, junto a González Pons (i); el presidente del PP balear, José Ramón Bauzá; Arenas y Ana Mato, ayer, en Palma de Mallorca. :: EFE
ESPAÑA

Rajoy saca pecho por el buen momento del PP y anuncia que será inflexible con la corrupción

El presidente popular corrige a Cospedal e insiste en que su partido no debe moverse del centro

PALMA. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Mallorca se antoja un feudo sensible y delicado para hablar de corrupción política, sobre todo vinculada al PP. El 'caso Palma Arena', en el que está imputado el ex presidente autonómico popular Jaume Matas, pesa como una losa. Y no es el único sumario abierto contra ex dirigentes del PP. Tal vez por esta circunstancia Mariano Rajoy eligió Palma de Mallorca para sacar pecho por el buen momento del partido -con encuestas que le otorgan cinco puntos de ventaja sobre el PSOE- y, sobre todo, para anunciar que será inflexible con la corrupción.

Pero Rajoy, sobre todo, habló en clave de 2012. El conclave popular que concluyó ayer le ha servido al partido, según su jefe de filas, para enriquecer las propuestas del cambio de rumbo que el PP quiere imprimir a la política española. Un cambio que se sustenta en una estrategia de centro y «reformista», alejando cualquier interpretación de un posible regreso a posiciones de «centro derecha» -término que empleó María Dolores de Cospedal en su intervención del viernes-.

Rajoy empleó ayer buena parte de su discurso, en la clausura de la XV interparlamentaria popular, para hacer un recorrido por los «malos momentos difíciles» que han pasado en el PP balear con las denuncias contra miembros de su partido, aunque el relato bien podría referirse al conjunto de la formación y a la espina envenenada del 'caso Gürtel'.

El presidente del PP dejó claro que no permitirá que ningún miembro de su partido «haga lo que no es debido», aunque situó los comportamientos ilícitos en el pasado y no en el presidente ni en el futuro del PP. «Los ciudadanos nos juzgarán por lo que hagamos desde ahora», acotó.

Rajoy evitó explayarse en el pasado, salvo para recordar que, incluso en 2009, 'anus horribilis' para el PP, se lograron éxitos tan importantes como el triunfo en las elecciones gallegas y europeas y los buenos resultados en las elecciones del País Vasco. «Todas las dificultades se superan; si uno se empeña y se esfuerza, las cosas cambian», confesó.

El líder popular afirmó taxativamente que está de acuerdo que «el que la hace, la paga», pero consideró igualmente importante tener claro que «el que no la hace, no debe pagarla». Un planteamiento que le sirvió para delimitar las corruptelas y los presuntos hechos delictivos «en personas individuales» y no en el PP como formación. También advirtió de que creerá en la inocencia de todos «hasta que se demuestre lo contrario» y que, por supuesto, no entrará en juicios paralelos. «No acusaré a nadie si no tengo la firme convicción de que ha hecho lo que no debía», abundó.

Alternativa

El presidente del PP enfatizó más en su alternativa, sobre todo económica, que en criticar a José Luis Rodríguez Zapatero. Un mensaje en positivo con unas recetas ya conocidas: reformas laboral y fiscal; reorganización del sistema financiero para que vuelva a fluir el crédito y, sobre todo, un plan de austeridad para que el Estado «deje de gastar lo que no tiene».

Rajoy mantiene la economía en el eje de su acción de oposición. «Se puede y se debe hacer más por España», dijo tras lamentar que el Gobierno socialista «se haya resignado» y que no acometa las medidas necesarias para sacar al país de la crisis y, sobre todo, para reducir la tasa de paro, con más de cuatro millones de ciudadanos sin empleo.

El presidente aprovechó su disertación para anunciar que mañana enviará al Gobierno la propuesta de pacto por la educación. «Una propuesta con contenidos», indicó Rajoy en contraposición con la «improvisación» que reprocha al Gobierno.

Tampoco faltaron felicitaciones a Javier Arenas, tras conocerse una encuesta oficial de la Junta que le otorga al PP una ventaja de casi dos puntos sobre el PSOE. «En la vida uno recoge lo que siembra», comentó Rajoy tras destacar el «muchísimo» trabajo que ha realizado el presidente del PP andaluz. «En Andalucía viven ocho millones de españoles que son infinitamente mejores que su gobierno», acotó.