Cambio de chip
Actualizado: GuardarAcualquier aficionado al tenis y más concretamente a Rafa Nadal le habrá impresionado cómo ha vuelto el número dos del mundo al trabajo tras un parón de algo más de un mes sin competición. Ha sido tiempo suficiente para que cambie de chip y los resultados o al menso las buenas sensaciones vuelvan, aunque sea quizás un poco pronto para cantar victoria, dado que la verdadera prueba de fuego comienza en unos días, el Open de Australia donde defiende título. Nadal terminó el año desmoralizado e incapaz de ganar a un tenista de alto nivel. Pedía a gritos que terminara la temporada y cantaba a los cuatro vientos que deseaba que llegara 2010, donde prometía mejorar. Así lo ha hecho, no ha descansado ningún día, ha entrenado todos los días de las fiestas y los resultados están ahí, ganó el primer torneo no oficial de la temporada y en el primer oficial ha llegado a la final donde tuvo dos puntos de partido aunque el ruso Davydenko le arrebatara la victoria. Poco más se le puede pedir. «Entrenándome bien, trabajando mucho, como lo hago yo, es el único camino para mejorar esta situación. Es lo que he hecho toda mi vida… trabajar», fueron palabras del tenista que tiene una primera parte del calendario realmente difícil donde defenderá casi todos los puntos hasta llegar a Roland Garros, ya que su inicio de temporada en 2009 fue realmente sobresaliente. Además del físico le deberá acompañar la mentalidad que siempre le ha acompañado, ya que muy posiblemente a pesar de llegar a finales o semifinales no será suficiente para mantener todos los puntos en el Ranking ATP y los Djokovic, Del Potro y Murray, por no hablar del insípido pero efectivo Davydenko pueden amenazar su segunda posición. Pero paso a paso, el año pasado tuvimos un enero tenístico sobresaliente con Fernando Verdasco y él brindándonos el mejor partido del año en Australia, y porqué no soñar con que sucederá lo mismo en unas semanas… materia prima hay, y cambio de chip, también.