Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizSan Fernando
Joaquín Moreno, ante las obras que pretenden derribar los bloques de Montañeses de La Isla. :: C. C.
SAN FERNANDO

«Por poco me tiran la casa sin avisar y encima quieren que pague el retraso»

La Junta inicia el derribo de Montañeses de La Isla pero sólo caen dos inmuebles ya que hay un propietario que se niega a dejar su casa

CARLOS CHERBUY sanfernando@lavozdigital.es
Actualizado:

Acorralado por las máquinas, las vallas y los escombros. El mayor temor de Joaquín Moreno se ha hecho realidad. El único vecino de Montañeses de La Isla que no ha llegado a ningún acuerdo para la expropiación de su vivienda, a consecuencia de las obras del tranvía, vio en la mañana de ayer como caían los dos primeros bloques de la manzana. Un derribo que se producía mientras él estaba negociando con Obras Públicas una salida a su problema. Solución que no se encontró, ya que aunque la Junta está dispuesta a subir la oferta y dar 30.000 euros más por su vivienda (le ofrecían 100.000 euros), continúa sin querer hacerse cargo del local que Moreno tenía arrendado por unos 1.000 euros al mes.

Motivo por el que las máquinas tuvieron que parar sin que puedan volver a encender su motor hasta la próxima semana. Moreno tiene ya entre sus manos la carta que le avisa que en diez días -el plazo finaliza el viernes de la semana que viene- tendrá que desalojar su propiedad para que se proceda al derribo, sin embargo la orden realizada por Obras Públicas no se encuentra respaldada por un juez y por ello este vecino afirma: «Hasta que no me den una orden judicial no me iré de aquí. Si el día 22 me quieren traer a la Policía que lo hagan pero no abriré la puerta sin una orden».

Máquinas a la puerta

A pesar de su edad el último inquilino que queda en la zona está dispuesto a dar guerra ya que no le quedan más posesiones que perder. «Me han quitado mi casa, el local que tenía arrendado y por tanto el pan que me daba de comer. Me he tenido que ir de alquiler con mi pensión de 700 euros y encima me amenazan con que si la obra se retrasa tendré que hacerme cargo de los gastos de la contrata. Pero, si yo no tengo ya nada, qué más puedo perder. Por eso pienso seguir aunque mentalmente me quieran destrozar con las máquinas en la puerta».

Moreno asegura que su casa sigue estando habitada ya que en muchas ocasiones uno de sus hijos siempre va a dormir y él acude cada mañana para cuidar a sus pájaros. Es por ello que considera que la Junta está siendo muy temeraria al iniciar el derribo ya que podría afectar a los cimientos de su vivienda, a la que no piensa renunciar. Mientras tanto desde Obras Públicas se afirma que el derribo se inició con total normalidad y que la próxima semana caerán el resto de inmuebles ya que según el organismo público los trámites de expropiación han finalizado con el pago de las correspondientes indemnizaciones.