Los alcaldes serranos de IU critican a su propio partido por el reparto de ayudas

Una resolución aprobada por la Consejería de Gobernación para otorgar subvenciones, con carácter excepcional, a entidades locales de la provincia, ha desatado la guerra interna entre los alcaldes de Izquierda Unida de la Sierra y la dirección de su partido. En concreto, dichas ayudas han sido otorgadas a Alcalá del Valle (IU) y Arcos (PSOE) con 125.000 euros para cada uno, Villamartín (PSOE) con 175.000 euros; Sanlúcar (PSOE) con 325.000 euros; Barbate (PSOE) con 500.000 euros y La Linea (PP) con un millón de euros.

Los regidores de Olvera, Fernando Fernández; Puerto Serrano, Pedro Ruiz; y Espera, Pedro Romero -todos ellos de IU- han mostrado su malestar porque este dinero «se reparta de manera totalmente arbitraria». Además consideran que todo forma parte de un reparto político en el que «nuestro propio partido ha aceptado entrar en el pasteleo», aseguró Romero, añadiendo que «esto es inaceptable y los responsables de esta situación deben de dimitir».

Este malestar ha vuelto a reabrir en la comarca la posibilidad de que estos ediles pudieran abandonar la disciplina de Izquierda Unida. Todos ellos pertenecen al Colectivo unitario de Trabajadores (CUT) de Cádiz, partido integrado dentro de Izquierda Unida, y entienden que «esta es una diferencia más que hacen los dirigentes del Partido Comunista, desde la dirección de IU, con nosotros», destaca Romero. Además, lamenta que «los responsables de nuestro partido que ocupan cargos en las instituciones no son para nada accesibles para nosotros, hasta el punto de que recibimos mejor trato de los representantes del PSOE que de ellos».