La 'Eñemanía', símbolo de San Fernando
Actualizado: GuardarLa 'Eñemanía' siempre se ha sentido de forma especial en San Fernando y por ello el Ayuntamiento ha decidido entregar a la Federación Española de Baloncesto el premio a la promoción de la identidad isleña, máxima distinción que se le otorga a las personas y colectivos que contribuyen a la promoción de la ciudad fuera de las fronteras de la provincia.
Un reconocimiento al importante vínculo que se ha formado entre La Isla y los jugadores de la selección ya que han sentado en Bahía Sur su base de concentración para las grandes citas internacionales. Una relación que dura ya varios años y que permite que Gasol y compañía se sientan en las instalaciones como si estuvieran en su propia casa. De hecho, en las paredes del propio hotel se pueden ver fotografías firmadas en la que los deportistas afirman sentirse como en casa y agredecen el cariño y calor de los isleños.
El propio alcalde, Manuel María de Bernardo, ha comunicado al presidente de la FEB, José Luis Saez, la propuesta que ha sido acogida con enorme satisfacción. De Bernardo destacó que «con este premio vamos a reforzar más aún ese vínculo ya que coincide con la conmemoración del Bicentenario de las Cortes de La Isla de 1810 y el deporte es una de las señas de identidad del San Fernando moderno y los valores positivos que vamos a impulsar entre todos desde el Espíritu del Diez».
El premio, una reproducción de la estatuilla del dios fenicio Melkart hallada en Sancti Petri, se entregará en un acto específico a celebrar en Madrid durante la próxima Feria Internacional de Turismo FITUR 2010. Fue en 2000 cuando se dio el primer premio que recayó en la figura de Camarón de La Isla. De esta manera, la FEB se une a un selecto club que resalta por su capacidad para dar a conocer San Fernando.
La visita de las selecciones masculinas y femeninas a la ciudad se ha convertido en una tradición muy esperada por los isleños que se agolpan en las puertas del hotel para lograr un recuerdo de sus ídolos y que se vuelcan en el día del espectador en el que los jugadores agredecen con regalos el apoyo dado en todas las concentraciones, un ambiente que sin duda ha servido para que la selección se haya convertido en una de las más temidas tanto en el europeo como en el mundial.