El Consistorio confía en agilizar las obras en la N-IV para facilitar la apertura de Ikea

Todo el proyecto de urbanización de la antigua N-IV está en manos del Gobierno central, que es quién debe aprobar la cesión de esta vía al Ayuntamiento para que éste pueda realizar los trabajos que permitan su integración en el entramado urbano.

Así lo recalcó ayer el delegado de Urbanismo, Juan Pedro Crisol, que recordó que no ha habido más avances en relación a este proyecto más que las gestiones que se están haciendo con la Administración central para que la titularidad de la N-IV pase a ser municipal.

En este sentido, Crisol enfatizó que las obras van a comenzar sin problemas en 2010 -«están recogidas en los presupuestos de este año y es un objetivo prioritario», llegó a decir-, y lo harán con el primero de los cuatro tramos previstos: el que va desde la rotonda del Hospital hasta la rotonda de Garvey, que se costeará con la indemnización de cerca de cuatro millones de euros que debe abonar el Gobierno central por ceder la vía.

El delegado enfatizó que lo ideal es que este tramo, que incluye el desdoble del tablero del puente de la carretera de Trebujena, se ejecute lo antes posible para que coincida con la apertura de Ikea en abril, que va a incrementar la actividad y el tráfico en esta zona.

Pero no será el único proyecto que se pondrá en marcha, ya que también está previsto el nuevo cerramiento de la parcela de Cedown; la apertura al público del huerto, pabellón real, aljibe y torre octogonal del Alcázar; la adaptación del local destinado a Aspanido en la calle Zaragoza; la restauración de la Fuente de la Ermita de Guía; el proyecto de las 60 VPO en El Portal; o las 72 viviendas protegidas en Avenida Blas Infante, entre otros.