La suerte juega a la reválida

Mañana llega la segunda oportunidad para todos aquellos que, el pasado 22 de diciembre, tuvieron que conformarse con tener buena salud, porque el Gordo de Navidad pasó de largo.

Cádiz fue una de las provincias menos afortunadas aquel día y se enfrenta ahora a la reválida que supone el Sorteo Extraordinario de El Niño, con la esperanza de que esta vez algún gaditano pueda descorchar el champán con un premio entre sus manos.

La provincia juega con la desventaja de ser una de las ocho andaluzas en la que menos décimos se venden. Sin embargo, muchas administraciones de lotería han llegado a ver cómo se formaban colas en sus puertas con los compradores rezagados que, como suele ser habitual, esperaron al último minuto para comprar suerte en forma de número. «Las terminaciones que más piden nuestros clientes han sido el tres, el seis y el nueve. Como cada año, el trece ha volado. Pero desde que en la tele se ha dicho que El Niño va a acabar en cero, muchos nos lo están pidiendo ahora», recuerda Emilio Paredes, lotero de la administración Alba, que desde hace 27 años reparte suerte en la calle Acacias de la capital gaditana. Ayer, la fila india de clientes que salía de su pequeño local, llegó a medir 10 metros de largo. Como recuerda Paredes, este sorteo se nutre de muchos jugadores que consiguieron la pedrea el 22 de diciembre y la reinvierten ahora. Sin embargo, reconoce que el Gordo es mucho más popular que El Niño. Se estima que los gaditanos gastarán unos 14,09 millones de euros, casi dos millones menos que lo invertido el año pasado en la provincia. La disminución, sin duda, le deberá mucho a la crisis.

Aún hoy están a tiempo de comprar su suerte, un día antes del Sorteo. Y si no toca, al menos pueden consolarse con lo que los Reyes Magos les hayan regalado.