Huelga de hambre contra el derribo
Los 30 detenidos el pasado lunes tienen la intención de presentar una denuncia contra la Policía Local por «detención ilegal» El promotor de Majadillas inicia su protesta a las puertas de la Gerencia de Urbanismo
CHICLANAActualizado:El promotor de las viviendas derribadas en Majadillas hace una semana cumple su amenaza. Tal y como anunció el sábado en rueda de prensa, Antonio Tocino comenzó ayer una huelga de hambre «indefinida», que tiene como objetivo según su portavoz «pedir explicaciones por que se hayan tirado sus casas y no otras muchas en Chiclana».
El patriarca de la familia Tocino inició su protesta en compañía de buena parte de su familia en la mañana de ayer. Tras acudir a primera hora a los juzgados de la localidad para recoger el auto judicial que los absuelve de cualquier cargo en compañía del resto de detenidos, (30 personas en total, Antonio Tocino se desplazó a la puerta de la Gerencia de Urbanismo, donde permanecía al cierre de esta edición con la amenaza de no ingerir alimento en los próximos días como medida de protesta.
Según ha podido saber este medio, algunos miembros de la familia han intentado disuadir al promotor, de 63 años de edad, para que no iniciara la huelga ya que ésta podría ocasionarle serios perjuicios de salud. Sin embargo, Antonio Tocino ha decidido seguir adelante con su reivindicación para luchar «por lo que es justo».
El promotor de las unifamiliares sin licencia derribadas en Majadillas Bajas el pasado lunes 21 de diciembre considera que con este caso «se ha cometido una injusticia muy grande», y reitera que «detrás de todo esto tiene que haber algo personal o político contra nosotros», apunta.
Según explicó ayer el portavoz de la familia Tocino, el político chiclanero José Luis Velázquez (presidente de DIPA), en los próximos días las personas que fueron detenidas minutos antes de que las excavadoras derribaran las viviendas de Majadillas por resistencia a la autoridad y desobediencia, presentarán una denuncia formal por «detención ilegal y abuso de autoridad».
Estas querellas irán, según ha adelantado Velázquez, personalizadas también contra el Inspector Jefe de la Policía Local de Chiclana, que a su juicio tuvo un comportamiento especialmente virulento hacia ellos.
Velázquez cree que la denuncia está plenamente justificada por el hecho de que «absolutamente todos los detenidos hayan salido libre de cargos», lo que demuestra a su juicio que «no había motivo alguno para detenernos».