Jerez responde a la llamada y llena la despensa de Cáritas

Tal vez sólo hacía falta un recordatorio de que pese a la crisis y los problemas económicos siempre hay familias para las que la situación es mucho más crítica que para uno. Y eso fue lo que significó el llamamiento de Cáritas de San Rafael hace casi dos semanas, cuando alertó de que la aportación de ayudas había descendido tanto que les era imposible asistir a las 237 familias que habitualmente acuden a pedir alimentos a esta parroquia ubicada en plena zona sur.

Y es que la voz de alarma lanzada ha surtido efecto y ha hecho remover las conciencias hasta el punto de que si hace 10 días esta parroquia había recogido apenas unos 500 kilos de comida en su campaña de Navidad, frente a los 6.000 del año anterior, ahora desde este organismo ya contabilizan casi 16.500 kilos que «han servido para dar de comer a las familias con las que siempre trabajamos, pero también a algunas más a las que hemos podido ampliar esta red».

Así lo explica Francisco Holgado, representante de Cáritas de San Rafael, que reconoce que todavía sigue llegando ayuda y que narra que «el teléfono todavía suena y es algún ciudadano que nos quiere traer o algo o que nos avisa de que se han instalado punto de recogida en diversas partes de la ciudad para facilitar la entrega de alimentos».

Eso es lo que ocurrió en el caso de la asociación El Alcázar de la Policía Local de Jerez, que ubicó en la entrada de la Jefatura, situada en El Almendral, varios contenedores donde se podían depositar donaciones que se trasladaban diariamente a Cáritas.

En la misma línea, establecimiento como el conocido bar La Moderna decidió instalar otro punto de recogida de alimentos no perecederos, y alrededor de 15.000 kilos se recogieron en el marco de la Campaña Eurotaller, la red solidaria que estos talleres mecánicos asociados han llevado a cabo dando facilidades y rebajas en el coste de los servicios a los clientes que llevaran alimentos.

La generosidad ha sido tanta que Holgado no tiene más que palabras de agradecimiento para la ciudad de Jerez y entorno, así como de otras provincias cuyos ciudadanos también se rascaron el bolsillo. Algunos, como una mujer de Jerez, llegaron a donar 237 lotes de pollos enteros y avíos de puchero, lo que permitió que «por primera vez se haya podido entregar a estas familias algo de carne».