Un terrorista suicida provoca una matanza en la fiesta más sagrada de los chiíes en Pakistán

Una treintena de personas han muerto y cerca de 80 han resultado heridas en un ataque suicida perpetrado contra una procesión chií en Karachi. La explosión ha tenido lugar en la parte delantera de una marcha que conmemoraba la festividad de la 'Ashura', la más sagrada de la comunidad islámica chií.

El atentado ha desatado la alarma entre los participantes en la procesión e instantes después se han registrado varias estampidas. En respuesta al ataque, algunos fieles chiíes han prendido fuego a 15 vehículos en esta ciudad del sur de pakistán y han apedreado a la Policía. La procesión chií -corriente del Islam minoritaria en Pakistán- transitaba por la avenida Jinnah en el momento de la explosión.

Alerta en la fista de Ashura

El primer ministro de Pakistán, Yusuf Razá Guilani, ha condenado el atentado y ha llamado a la población a mantener la paz durante la festividad. Una portavoz de la provincia de Sindh -cuya capital es Karachi- ha asegurado que unos 100.000 policías y 5.000 agentes de un cuerpo especial de las fuerzas de seguridad se hallan desplegados en la urbe meridional. El 'nazim' o máxima autoridad civil de Karachi, Mustafá Kamal, ha manifestado a los medios que el ataque no es sólo contra una confesión religiosa concreta sino contra todo Pakistán.

Desde anoche tienen lugar largas procesiones chiíes en las principales ciudades de Pakistán, donde se han intensificado las medidas de seguridad ante el temor de que se registren episodios de violencia confesional. La festividad de la 'Ashura', el décimo día del mes de Muharram, conmemora el martirio del imán Husein, nieto del profeta Mahoma, quien un día antes de morir fue derrotado en la batalla de Kerbala junto a 72 de sus compañeros en el año 680 por el ejército del califa omeya Yazid I