Cuba hace balance a un año con el cinturón apretado
Raúl Castro analizará hoy ante la Asamblea Nacional los cambios económicos adoptados y presentará el programa para 2010
LA HABANA. Actualizado: GuardarEl presidente cubano, Raúl Castro, hará balance hoy del año que se agota y presentará el plan para 2010 ante la Asamblea Nacional. Algunos de sus conciudadanos esperan anuncios espectaculares, pero parece que no habrá muchas novedades y el cinturón deberá seguir apretado. Sí se sabrá si las expectativas de reformas aperturistas se cumplen o se desvanecen. De cualquier manera, «si Raúl no ha tomado ya medidas no creo que lo haga ahora», dice Niuri, una enfermera que cobra, como la mayoría de sus compatriotas, alrededor de 15 euros mensuales.
Después de varios días de comisiones sectoriales, los diputados escucharán el resumen de un período caracterizado por la crisis y pérdidas de 7.000 millones de euros (el 20 % del PIB) provocadas por el bloqueo estadounidense y los huracanes de 2008. La economía parece haber sorteado el trance a trancas y barrancas aunque los resultados no son los deseables pese al esfuerzo enorme por recortar gastos y el intento de reactivación de la producción interna.
Aunque están perfilados, no acaban de cuajar los «cambios de concepto y estructurales». El ministro de Agricultura, Ulises Rosales del Toro, reconoce que hubo de todo. «Falta de sistema, de organización, deficiencias de dirección en la producción y en la comercialización, y problemas de transportación y precios. Sería iluso pensar que esto se puede resolver en cinco meses».
Pese a todo, puede estar satisfecho, pues su sector es el que más ha avanzado. Se concedieron en usufructo tierras ociosas a 100.000 personas y el aumento de producción representó un crecimiento del 7% en las cuentas del Ministerio, pero persisten problemas en la distribución de los productos.
Unificación de la moneda
En otros campos falta mucho por hacer. Lo más complicado -y lo que más reclama la población- es la unificación de dos sistemas económicos y de dos monedas que conviven a duras penas. Corren de boca en boca, rumores de que en enero se implantará una nueva moneda, supuestamente acuñada como 'mambí', pero los especialistas opinan que la isla no tiene recursos para respaldar un cambio tan profundo como necesario.
El Gobierno rebajó un 30 % el gasto en importaciones, que en el 2008 alcanzaron los 10.000 millones de euros. Los ingresos también han disminuido. Los precios del níquel, principal producto de exportación, cayeron un 40 %. El turismo, que en 2008 dejó 2.000 millones de euros, ha cosechado hasta la fecha 110 menos.