Y Arsène Wenger perdió la paciencia

El entrenador del Arsenal londinense, Arsène Wenger, está decidido a presentar a la Federación Holandesa de Fútbol una demanda de compensación por la lesión de su delantero Robin Van Persie, que sufrió una grave lesión en el tobillo de su pierna derecha en un amistoso contra Italia el pasado 15 de noviembre.

El club de la Premier confirmó que sus abogados están estudiando la demanda y que su voluntad es presentarla.

El caso, que podría llegar a los tribunales, puede tener consecuencias para la organización de partidos amistosos internacionales, a los que Wenger se opone cuando las ligas nacionales están en marcha.

El caso Van Persie trae ecos de lo sucedido en la larga saga legal en torno a Abdelmajid Oulmers, el jugador marroquí que en noviembre de 2004 sufrió rotura de ligamentos cruzados cuando jugaba un partido amistoso entre la selección de su país y la de Burkina Faso. Oulmers no pudo jugar para su club, el Charleroi belga, durante los ocho meses que estuvo lesionado.

El club belga demandó a la FIFA con el argumento de que, durante el tiempo en el que su futbolista permaneció lesionado, tuvo que pagar su operación y los salarios sin recibir compensación alguna. La asociación que agrupaba por aquel entonces a los grandes clubes europeos, el G14, apoyó al Charleroi en su demanda.

Cuando el caso llegaba al Tribunal Europeo de Justicia, que ya acabó con las retenciones forzosas de futbolistas en su sentencia sobre Jean Marc Bosman, en 1995, la UEFA y el G14 llegaron a un acuerdo, en enero de 2008, que incluyó la retirada de la demanda legal, una carta de intenciones de la UEFA y la disolución de la G14 y su conversión en un grupo más amplio, la Asociación Europea de Clubs(ECA).

Compensación

La UEFA llevó entonces a la práctica lo que había prometido y en el Euro 2008 se estableció por primera vez un sistema de compensaciones a los clubes por los futbolistas que participaron en las selecciones de la competición. Las cantidades eran de 4.000 euros por cada día en el que el futbolista estaba en las finales y el paquete total fue de 43,5 millones.

También se ha acordado el paquete de compensación por la Copa del Mundo en Sudáfrica, 76 millones de euros.

Pero no hay compensación por la participación de futbolistas de clubes en los partidos de la fase de calificación. El Arsenal persigue ahora otro vacío de las regulaciones, la participación en amistosos.

Según el técnico Arsene Wenger, simplemente no debieran celebrarse cuando las competiciones domésticas están en marcha. Su club ha perdido este año al danés Bentdner, al inglés Gibbs, al francés Diaby y al holandés Van Persie cuando jugaban con sus selecciones.

Y, en el caso de estos dos últimos, hubo bastante polémica sobre el tratamiento médico que recibieron los jugadores tras sus graves lesiones producidas en estos encuentros amistosos de sus respectivas selecciones.

Calendario internacional

El entrenador francés del Arsenal ha planteado también una exigencia que en realidad ya se ha llevado a la práctica. Quejoso porque su equipo perdió en Sunderland tras los partidos internacionales amistosos, ha pedido que la FIFA plantee además el calendario internacional estableciendo que, cuando hay dos partidos seguidos, se juegen de viernes a martes y no de sábado a miércoles, como ocurre en la actualidad.

La FIFA ya ha acordado la introducción de un calendario de ese tipo para la próxima temporada 2010-2011, de tal modo que los jugadores internacionales puedan regresar a sus clubes de origen un día antes, lo que ofrece un mayor tiempo de recuperación especialmente en ligas que, como la inglesa, se juegan habitualmente en la jornada del sábado.