![](/cadiz/prensa/noticias/200912/09/fotos/1358448.jpg)
Termina la penitencia
El terrorista Ali Agca que disparó a Juan Pablo II en 1981 saldrá en libertad el próximo 18 de enero dispuesto a hablar al mejor postor
ROMA. Actualizado: GuardarEl hombre que intentó matar a Juan Pablo II el 13 de mayo de 1981, y que después ha pasado 28 años en la cárcel inventando decenas de historias de cómo y por qué lo hizo, sin terminar de aclararlo nunca, será puesto en libertad el próximo 18 de enero. Lo anunció ayer el diario italiano 'La Repubblica'. Si se confirma oficialmente, Ali Agca, terrorista turco que entonces tenía 23 años, saldrá con 52 recién cumplidos, pero con las mismas ansias de protagonismo y capacidad de fabulación que le han hecho célebre. En resumen, es probable que a partir de ahora haya Ali Agca hasta en la sopa.
En realidad, ya cumplió su pena por el atentado, tras serle concedido un indulto del Gobierno italiano en 2000. Pero entonces fue extraditado a Turquía, donde tenía pendiente otra condena por el asesinato en 1979 del director del diario 'Milliyet', Abdi Ipekci, un importante periodista de este país. Si no hay imprevistos que alarguen su reclusión a última hora, como ya ocurrió hace tres años, nada más salir empezará a subastar entrevistas exclusivas al mejor postor, se supone que con explosivas revelaciones. El precio es dos millones de dólares y parece que ya hay una gran cadena televisiva dispuesta a pagar. Según dice él, tendría unas cien peticiones de entrevistas de diarios de todo el mundo.
Es asombroso que los medios sigan picando, pues hace poco se jactó de haber dado 50 versiones distintas de la génesis del atentado contra Karol Wojtyla. Pero no se descarta que pueda alumbrar alguna más. La Justicia italiana hizo en su día lo que suele hacer en estos casos: tres procesos y cuatro investigaciones que abrieron escenarios fascinantes y novelescos pero no aclararon nada. Tras la 'pista búlgara', que desacreditó el propio Juan Pablo II, la maraña de tesis comprende, al mejor estilo de los misterios italianos, desde una conspiración soviética y de la Stasi a la Mafia y el escándalo de las finanzas vaticanas. En todo caso tal vez ahora se consiga descifrar al menos si Ali Agca es muy astuto o que, definitivamente, está como una maraca.
Perdonado por Juan Pablo II en la Navidad de 1983, Ali Agca fue de iluminado durante una fase de su reclusión. Consideraba que sólo había sido un instrumento divino, ocurrencia que fue a más cuando el Vaticano dio a conocer en 2000 el llamado tercer secreto de Fátima, que hablaba en términos alegóricos de un papa que moría por unos disparos. Agca, metido totalmente en el personaje, ha llegado incluso a pedir la nacionalidad portuguesa. Antes había probado con la polaca, pero nada.
En cualquier caso, Agca ha afirmado que no piensa quedarse en Turquía y quizá se establezca en Italia. Convertido al cristianismo, ha proclamado su deseo de visitar la tumba de Juan Pablo II para rezar junto a ella. También tiene pensado escribir un libro, pero no uno cualquiera -que ya ha escrito, titulado 'Mi verdad'-, sino un superventas. Agca habría contactado a Dan Brown, el autor de 'El Código Da Vinci' para perpetrar una especie de 'Código Vaticano', y hasta aspira a que hagan una película.