Marruecos aconseja a Haidar que solicite un pasaporte «argelino o de otro país»
El Reino alauí asegura que la "única responsable" de la situación es la activista saharaui
MADRID Actualizado: GuardarEl Gobierno marroquí insiste en que "la única responsable" de la situación en la que se encuentra Aminetu Haidar es la propia activista saharaui y Argelia y el Frente Polisario que están tras ella, por lo que le recomienda que dado que no se siente marroquí y tampoco quiere un pasaporte español, solicite uno "argelino o de otro país" que suela dárselo a los miembros del Polisario.
En una entrevista, el ministro delegado ante el primer ministro para asuntos económicos y generales, Nizar Baraka, ha subrayado que "Marruecos no puede dar un pasaporte a una persona que no se cree marroquí" como es el caso de Haidar, expulsada desde El Aaiún por las autoridades alauíes el pasado 14 de noviembre a Lanzarote y en huelga de hambre desde dos días después.
"Lamentamos lo que le está ocurriendo en el plano humano pero la responsabilidad es de ella", insiste Baraka, que también es responsable de Relaciones Internacionales del Istiqlal, el partido en el poder, puesto que la activista saharaui "ha rechazado la nacionalidad y el pasaporte marroquí y también ha rechazado todas las propuestas que le ha hecho el Gobierno español".
"Marruecos no es responsable, España no es responsable, la única responsable es ella y la gente que está detrás, el Polisario y Argelia", ha denunciado, recomendando en este sentido a Haidar que, puesto que "defiende la posición" del Frente Polisario, "busque un pasaporte argelino o de otro país que dé pasaportes a la gente del Polisario".
Buena relación con España
Por otra parte, Baraka ha aprovechado para aclarar las declaraciones del lunes del ministro de Exteriores marroquí, Taieb Fassi Fihri, quien dio a entender que la cooperación en materia de inmigración con España podría estar en juego por el caso de la activista saharaui.
Según el ministro delegado, lo que Fassi Fihri quiso poner de manifiesto es que Marruecos y España tienen actualmente "unas relaciones muy fuertes" y una "confianza mutua que han permitido resultados claros", sobre todo en materia de inmigración con un descenso del 92% de la inmigración desde el territorio marroquí a España entre 2004 y 2009 y de un 22% en el caso de los menores no acompañados en 2009 con respecto al año anterior, pero también en materia de narcotráfico o terrorismo. Además, ha resaltado, España es el segundo socio económico y comercial del país norteafricano.
Marruecos y España han llegado a un nivel de relaciones en el que "nada tiene que estropearlo", ha insistido, recordando que tanto el ministro marroquí como el titular de Exteriores español, Miguel Angel Moratinos, han reconocido que se trata de una "relación vital" para ambos países.
En la misma línea se ha manifestado el ministro de Justicia de Marruecos, Abdelwahed Radi, quien ha asegurado que tanto su país como España son víctimas de la situación en el caso de la activista saharaui. No se trata de un problema creado por España y Marruecos, ha dicho el ministro marroquí, quien se ha mostrado convencido de que esta situación no afecta a las relaciones entre ambos países.