El PP aventaja en más de cinco puntos al PSOE
Una encuesta de la revista 'Temas', presidida por Guerra, detecta un vuelco electoral por la sangría de apoyos a Zapatero
MADRID. Actualizado: GuardarLa encuesta anual sobre tendencias electorales que realiza la revista 'Temas', presidida por Alfonso Guerra, otorga al PP una ventaja sobre el PSOE de más de cinco puntos, la más alta registrada en los sondeos de intención de voto dados a conocer este otoño. De hecho, se trata del doble de diferencia que la otorgada por el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicado en noviembre pasado, y realizado, como el sondeo anterior, en octubre, que señaló que el principal partido de la oposición saca 3,3 puntos de ventaja al del Gobierno.
La prospección de 'Temas', basada en 1.739 encuestas personales, con un nivel de confianza del 95,5%, señala que si las elecciones generales se realizasen en este momento, el PP obtendría el 44,7% de los sufragios y el PSOE, el 39,5%, lo que supone un vuelco con respecto a hace casi un año, cuando el mismo muestreo fijaba casi un empate técnico (PP, 41,3%; PSOE, 40,5%). Los datos de campo se obtuvieron entre el 15 de septiembre y el 17 de octubre, cuando los hechos políticos más relevantes eran el debate sobre los Presupuestos del Estado de 2010 y las noticias sobre el 'caso Gürtel', una trama de corrupción que salpica a varios dirigentes populares.
El análisis del sondeo, firmado por el propio director de la revista, el catedrático José Félix Tezanos, desvela que la gran distancia, que incluso podría llegar a los seis puntos si se toman los datos más bajos de participación, se debe, fundamentalmente, a un enorme degaste de la imagen del PSOE entre sus propios votantes y no a un ascenso electoral del PP, que en realidad también pierde votos con respecto al sondeo que hizo la revista hace un año.
La sangría de apoyos socialistas se atribuye a las tendencias desfavorables de la realidad económica española y al clima de corrupción de la vida política que, aunque más centrado en las siglas del PP, provoca el mayor desencanto y aumento de la abstención en la franja electoral del centro-izquierda.
Crecen los indecisos
Los apoyos del PSOE se derrumban porque el 20% de los electores que respaldó sus siglas hace año y medio, en las elecciones generales de 2008, ahora cambiaría su apuesta por la abstención o el voto en blanco (9,5%) o pasaría a engrosar el ejército de los indecisos (10,3%). El trasvase de votos entre partidos es mucho más bajo y los socialistas sólo cederían un 5,2% de sus apoyos al PP y un 1,3% a IU. En suma, la fidelidad de sus antiguos votantes es sólo del 71%.
El PP se coloca en cabeza y destacado justo por lo contrario. Pese a no ganar prácticamente ni nuevos votantes ni electores de otros partidos, la fidelidad de quienes le apoyaron en 2008 es del 87,6%. Esto se traduce en que sólo trasvasa un 0,3% de votos al PSOE y un 1,3% al partido de Rosa Díez (UPyD) y que los antiguos votantes que le abandonan por la abstención o pasan al campo de los indecisos son justo la mitad que los que pierden los socialistas.
El desencanto general es de hecho el clima más detectado, pues las cifras de abstención del sondeo se situarían en torno al 42%, muy por encima de la media española en elecciones nacionales. Eso explica que pese a que los grandes partidos descienden más que aumentan, ni IU ni UPyD logran hacerse con los desencantados o los cansados de las siglas tradicionales. IU podría recibir unos apoyos cercanos al 5%, que sería una leve tendencia al alza, y la formación de Díez se acercaría al 3%, lo que supondría duplicar su tamaño.
Pese a las novedades del sondeo, sus analistas, tras cruzar los datos, destacan que se trata de una oscilación con «un sustento sociológico débil e inestable, que puede traducirse de manera diferente dentro de unos meses e incluso de unos días». Tezanos señala que, a la vista de las cifras, «no debe darse nada por descontado» ante los comicios generales de 2012, ya que en este momento «es muy difícil saber quién ganará». En su opinión, todo apunta a que las elecciones se sustanciarán «en el último tramo de una larga campaña».
Cree que, a la vista de las respuestas del sondeo, la posición del PSOE podría verse perjudicada si se mantiene la actual lentitud a la hora de aflorar datos económicos positivos y si la sentencia sobre el 'Estatut' provoca un duro recorte del texto. Por el contrario, apunta que los puntos flacos del PP son su «debilitad de liderazgo», «un anclaje en posiciones conservadoras duras», «los problemas internos» y que la mayoría sociológica, aunque a la baja, sigue en el centro-izquierda.