Líderes para Copenhague
Actualizado: GuardarEl mundo tiene la mirada puesta en Conpenhague. Miles de delegados de todo el mundo se darán cita en la capital danesa para cerrar un acuerdo global sobre el clima. Estas últimas semanas algunos líderes políticos han hecho declaraciones poco alentadoras con el objetivo de rebajar las expectativas. Per aún aún así el mundo mantiene su mirada fija en Copenhague, y sus esperanzas también, porque del acuerdo que se firme allí depende el futuro y la vida de millones de personas. Los países del Sur son los más afectados por el cambio climático, lo que se traduce en inundaciones, sequías, enfermedades, incluso migraciones forzadas, y a pesar de ser los menos responsables del calentamiento global.
Es la hora de abandonar la retórica y conseguir un acuerdo justo, ambicioso y vinculante como se decidió en Bali en el 2007, que reconozca la responsabilidad de los países ricos como causantes de la crisis climática. No es una cuestión de caridad sino de justicia. Las declaraciones recientes de muchos líderes políticos dan por descontado que estamos en una carrera contrarreloj y que ya no queda tiempo para cerrar un acuerdo vinculante con Copenhague, que establezca metas claras de reducción de emisiones y dinero contante y sonante para ayudar a los países pobres. En realidad es la falta de voluntad política -y no de tiempo- el único obstáculo real.
En su momento los políticos encontraron la determinación y los 8 billones de dólares necesarios para afrontar la crisis económica y financiera. Quizá algunos quieran rebajar las expectativas de Copenhague. Pero que se llamen a engaño: el mundo ha puesto ya el listón muy alto, y es que la vida de millones de personas está en juego.