EE UU y Rusia prorrogan el STAR-1 hasta que firmen un nuevo acuerdo
Moscú anuncia que las negociaciones con Washington sobre un tratado de desarme sustitutivos siguen y están en la «recta final»
MOSCÚ.Actualizado:Hoy expira el tratado de reducción de armamento nuclear START-1 y, tal y como vaticinaron la mayoría de los especialistas, Rusia y EE UU no han logrado todavía consensuar un nuevo acuerdo que lo sustituya. En Moscú tratan de quitar hierro a la demora asegurando que las negociaciones continúan en Ginebra y se encuentran ya en la «recta final». Creen que el documento podría estar listo antes de que acabe el año.
Sin embargo, y pese a que ambas partes hablan de prorrogar la vigencia del START-1, la Embajada estadounidense en la capital rusa informó de que sus especialistas, en misión de observación a tenor del tratado de desarme ya vencido, están teniendo que abandonar la factoría de cohetes de la localidad de Votkinsk, junto al río Kama. En ese centro se fabrican los misiles de la última generación Tópol-M y los de emplazamiento marino Bulava. «Nuestros inspectores han abandonado hoy Votkinsk a las 9 de la mañana», señalaba la nota de prensa distribuida por la Embajada de EE UU en Moscú. Llevaban allí casi dos décadas, según establece el START-1. Una de las exigencias que Rusia plantea es que el nuevo acuerdo no contemple tales misiones de observación.
El Ministerio de Exteriores ruso difundió ayer un comunicado señalando que «se acerca a su término el intenso trabajo de preparación de la firma de un amplio tratado bilateral vinculante para la reducción y limitación de armamentos estratégicos». En la nota se asegura que «el futuro tratado está llamado a ser un hito en la causa del desarme y la no proliferación, marcará un tránsito hacia un nivel más elevado de interacción entre Moscú y Washington, y confirmará la comunidad de objetivos de los dos países en el fortalecimiento de la seguridad mutua y global».
Después de que los presidentes estadounidense y ruso, Barack Obama y Dmitri Medvédev, ordenaran, tras su primer encuentro en Londres el pasado 1 de abril, que se intensificara la preparación del nuevo acuerdo de desarme, las conversaciones al respecto se han venido desarrollando en Ginebra. De su contenido no se ha sabido demasiado.
El portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, señaló que las reuniones continúan hoy en la ciudad helvética y que la vigencia del START-1 se extenderá mientras no se concluya el nuevo tratado. Lo mismo dijo el mes pasado el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, al señalar que «no habrá pausas entre el vencimiento de un acuerdo y la entrada en vigor del siguiente».
Sin embargo, la cúpula militar rusa ha advertido que, si para el próximo 1 de enero de 2010, no se ha logrado que el nuevo tratado de desarme esté ya firmado, los Tópol-M serán dotados de cabezas nucleares múltiples, algo que el START-1 prohíbe.