Clooney, con sus chicas

Presumiendo de chicas se presentó ayer George Clooney en Los Ángeles. Estrenaba su último trabajo, 'Up in the Air', en la que da vida a un soltero con auténtica fobia a perder su condición que se vuelca en el trabajo para no comprometerse con una mujer. Eso es en la ficción, porque en la vida real Clooney está con Elisabetta Canalis como un niño con zapatos nuevos.

No para de repartir sonrisas. Y razones no le faltan. Las más importantes de su vida le arroparon el otro día en Los Ángeles. Su actual pareja y su madre, Nina, posaron encantadas en el 'photocall' y aguantaron estoicas los flashazos que les disparó la gente de la prensa, interesada a partes iguales en la nueva película y en la compañía de Clooney.

Al menos de cara a la galería, la aspirante a nuera y la futura suegra han demostrado que se llevan fenomenal, que hay 'feeling' y que se reparten de manera equitativa y sin envidias los cariños del cotizado actor de Hollywood, todavía en el 'top' de los solteros más cotizados por mucho que suenen campanas de boda. El que fuera el romance más sonado del verano parece que va tomando cuerpo y la de Clooney ya parece una familia feliz, de ésas que se fotografían en Navidad y mandan postales con su retrato a las amistades.

Claro que las parejas estables no 'venden' tanto en este negocio y ya se ha hablado de crisis entre la italiana, de 30 años, y el estadounidense, de 48. De hecho, una revista asegura que Canalis le ha sido infiel a Clooney. Y da todo tipo de detalles. Dice que la modelo y presentadora se habría encontrado la semana pasada en Londres con el potente ex futbolista del Real Madrid Clarence Seedorf, con el que habría intercambiado «besos y ternuras» en un hotel. Elisabetta habría aprovechado que su novio estaba inmerso en el rodaje para ponerle unos cuernos de los que sólo hablan en los corrillos, pero de los que ninguno de los tres protagonistas ha dicho ni mu.

Ahora Elisabetta sale de la mano de Clooney en Los Ángeles, quizá en un intento de callar la boca a quienes insinúan y a quienes pregonan directamente que la cosa con el atractivo actor no marcha. Y, por si hubiera alguna duda, ahí está la madre de él echando un capote a la pareja y bendiciendo una relación que promete hacer correr ríos de tinta rosa.