La lluvia agua el encierro en calle Ancha
Otro intento frustrado de grabar a los toros por las calles de Cádiz
Cádiz Actualizado:A la carrera, pero no detrás de los toros. Que Cádiz no quiere ser Pamplona. O lo impiden los astados con su travesura o se empecina la lluvia en que no arrasen por las calles. La cuenta atrás de una semana que aspiraba a ser festiva para la ciudad está a punto de expirar. Y de alegría, nada. Caos y descontento a partes iguales entre vecinos y comerciantes y prisas e interrupciones para el equipo de producción y figurantes de la película más controvertida de todas las que se han grabado en la capital gaditana. Pero el ‘show’ debe continuar y por eso ni la intensa lluvia que cayó ayer sobre el escenario del rodaje de la cinta americana impidió que se siguieran con las tomas de acción que acompañarán a la cinematográfica historia de amor entre Tom Cruise y Cameron Diaz. Aguantaron las persecuciones, los smart, la Ducati, los tiros de la Kalashnikov –menudo susto–, las eternas horas de espera de los extras, los paseos de los dobles, los cortes de tráfico y de paso de viandantes, el cierre de los comercios –alguno se lo saltó– y las cámaras encendidas. Pero las reses no. Ni siquiera tuvieron oportunidad de salir de la finca. Y todo el mundo las nombra y espera. Ya sólo le queda una oportunidad, al menos oficial.
El calendario de grabación fijado tras los incidentes del domingo preveía la participación de los toros para el jueves y el domingo. La productora Calle Cruzada llama a la calma y asegura que, pese a las inclemencias meteorológicas, «todo rueda con normalidad». Hay muchas más imágenes que filmar. El racheo del coche que marcha al ritmo del descerrajar de las pistolas, el ‘travelling’ medido o la carrera de los mozos tras los vehículos. Incluso hubo tiempo para que los falsos Cruise y Diaz descansaran, y taperan, en el cuartel general de la productora instalado en la calle Veedor. Mientras, los extras gaditanos que si footing para arriba, periodicazo y mucho jaleo. Entre parón y parón, los mozos pedían los telefónos a las chicas o cantaban. De alguna manera tienen que matar el tiempo libre que deja el rodaje y, sobre todo, la molesta lluvia. Esa que también se espera para el domingo y que podría aguar de nuevo el encierro con los toros que aguardan en Jerez. Ya queda menos para el ‘The End’.