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La fusión de Unicaja y CajaSur se tensa por el recorte de mil empleos
La entidad cordobesa defiende que el plan de negocio incumple el protocolo suscrito y la caja malagueña mantiene que es la única alternativa realista
MÁLAGA Actualizado: GuardarEl encaje laboral en la fusión de Unicaja y CajaSur amenaza con romperse. El ajuste laboral exigido en la caja cordobesa ha terminado por convertirse en un nuevo y serio escollo para la viabilidad de la operación. El consejo de administración de CajaSur rechazó ayer tarde, por mayoría, el plan de negocio elaborado por una consultora externa que habría de aplicarse en su proceso de unión con la caja malagueña. La entidad presidida por Santiago Gómez Sierra considera «inadmisibles» los costes sociales que tendría la operación, pues supondría el despido de casi 1.000 de sus empleados.
A juicio de la mayoría del consejo, el mencionado plan de negocio, -realizado por The Boston Consulting Group, empresa contratada por Unicaja para este trabajo- «incumple en materia laboral el protocolo de fusión», que cerraron ambas cajas el pasado mes de julio.
En un escueto comunicado, Unicaja defendía ese plan de negocio como única alternativa «realista y rigurosa» para el buen fin del proyecto. Se puede decir de una manera más extensa, pero no más clara.
Única opción
El comité directivo de Unicaja, acordó -según reza en el comunicado y con carácter previo a la celebración de las próximas reuniones de la comisión ejecutiva y del consejo de administración- «aceptar en su conjunto y en sus partes el contenido del informe y diagnóstico realizado en el mismo sobre la situación presente y futura de cada caja y de su proyectada fusión». También señala que el planteamiento recogido en el informe «es el único consistente para hacer viable la entidad resultante de la unión entre Unicaja y Cajasur».
Por ello, el comité directivo recomienda a los órganos de gobierno de Unicaja que respalde dicho plan «como única alternativa realista y rigurosa para el buen fin del proyecto».
La pasada semana, la consejera andaluza de Economía y Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, dijo que sería «deseable» que la fusión entre Unicaja y CajaSur se fraguara antes de que finalizara el año, insinuó, no obstante, que habría que esperar a ver cómo sus presidentes terminaban de acomodar el plan de negocio. Ahora, los esfuerzos deberán de ir mucho más allá. Según apuntaron fuentes de la entidad cordobesa, llevar a la práctica dicho plan de negocio, -que las dos cajas debían presentar al Banco de España en el marco de su proceso de fusión- «conlleva medidas discriminatorias y traumáticas» para los empleados de CajaSur.
En concreto, según las mismas fuentes, el despido de ese millar de trabajadores de CajaSur, «se produciría sin garantías laborales, salvo para una treintena de posibles prejubilaciones». En un último intento por no cerrar todas las puertas, las mismas fuentes apuntaron que en la caja cordobesa «se sigue trabajando para tratar de reorientar el proceso de fusión con Unicaja» y cerrar el acuerdo «en los plazos previstos» por el órgano regulador.