Vuelve la acción a la calles del centro

El rodaje de la película Knight & Day prosigue en las calles del centro de Cádiz después de que la lluvia obligara a suspender los breves ensayos iniciados a primera hora de la mañana. A la espera de que aparezcan por la Tacita de Plata el fin de semana Tom Cruise y Cameron Diaz, sus dobles han estado rodando una escena de pura acción en la calle Cánovas del Castillo, con tiroteo incluido.

Ayer se llegó con satisfacción al término de la primera etapa. Maratoniana, pero a eso ya está acostumbrada una ciudad que en los últimos años ha soportado el rodaje de escenas de casi una decena de películas. Algunas del mismo relumbrón, pero ninguna de tamaño alboroto. Superado el examen de la seguridad, en el que la productora Calle Cruzada necesitó la verificación de la calidad de su plan por parte de la empresa auditora Vorsevi, comenzaron a realizarse las primeras tomas. A eso de las diez de la mañana, aunque desde primera hora el escenario, desde San Antonio hasta el Palillero, ya estaba totalmente encerrado. «¿Qué es esto?» preguntaba un despistado que debió de pasar las últimas semanas fuera de la ciudad.

«Esto» era la grabación de la secuencia que cerrará Knight&Day y que se unirá en el filme con otras rodadas en Sevilla, formando entre ocho y diez minutos del metraje. Y aunque entre vecinos y curiosos lo más repetido fue cómo se tarda tanto en generar tan poco de cinta, todos quisieron acercarse a los puntos calientes del rodaje.

Primero, para presenciar las carreras de los mozos que hoy, sol mediante, ya estarán delante de los cuernos de las reses. Pero ayer sólo hubo vehículos y uno de los que mejor pudo ver todo el personal ajeno al equipo que pululó por las inmediaciones de San Antonio, fue una ya conocida Ducati roja. La que montan los dobles de Tom Cruise y Cameron Diaz para escapar en una persecución de infarto y cuyo fotograma acaba en la esquina de la calle Buenos Aires.

Mientras los falsos actores recrean encalomados en la moto una escena de acción, la falta de actividad reina al otro lado de la plaza. La marabunta se traslada para ver algún que otro derrape, una pistola de gran calibre o una mirada cómplice de los intérpretes especialistas. La adrenalina de la película se filma en Cádiz y Sevilla pero, «¿para cuándo las escenas de ese amor que tanto promete la productora? ¿Cuándo llegan las estrellas?».

Extras descontentos

La espera de los astros se hace a partir de hoy más llevadera con la aparición en plano de los siete morlacos -menos uno que ha sido destituido-, que se escaparon el fin de semana de rodeo por la Plaza de las Flores. Todo apunta a que no surgirá de nuevo ningún incidente. No será por recortadores profesionales. Con la incorporación de los corredores pamplonicas, el grupo está más nutrido y, sobre todo, más preparado. Este compartió espacio con otro colectivo que también va vestido de blanco pero apenas ha vivido un San Fermín, el de los extras. Más de un centenar de gaditanos que sufrieron una auténtica jornada de rodaje hollywoodiense, horas de pie, seis de la mañana, bocadillo a las 10, turnos para ir al baño, el látigo del sol e incluso, cacheos del vigilante de seguridad.

Cincuenta euros al día no animan a muchos de ellos que se quejaron al término del rodaje del trato recibido por parte del equipo de la productora. Sobre todo con respecto a los corredores navarros. Tanto que alguno tildó la Plaza de San Antonio como «el albergue de un gueto». A partir de hoy, comparten protagonismo con los astados que bajarán la calle Ancha. Y para el domingo se espera a Tom y Cameron. Entonces sí que no habrá manera de rascar algún segundo de gloria.