LA ENTREVISTA «

-¿Podría algún día una viñeta llegar a hacer una revolución?

-Azagra: No, pero ayuda. No hace camino, pero ayuda a andar. Las revoluciones no se hacen con viñetas, pero, como la vaselina, ayudan.

-Kalvellido: Los dibujos siempre entran mucho mejor, el mensaje llega más fácil.

-¿Se pueden reivindicar las causas perdidas a través de un cómic?

-A.: Los dos tenemos una forma de hacer cómic reivindicativa, más social. Nosotros tenemos un espíritu de lucha y de reivindicación.

-K.: Yo he aprendido de este hombre todo (dice sobre Azagra). Estaba acostumbrado a los cómics de risa, la historia intimista no me va. Vi con él que podías divertirte y tener mensaje.

-Se incluyen en el bando de los artistas comprometidos.

-A.: Completamente

-K.: Yo más, porque ni cobro. La gente me dice: «¿Y tú como sigues...?».

-A.: (Se dirige a Kalvellido) En el momento en el que cobres te dirán 'vendido'. A mí los ortodoxos siempre me lo dicen. Estando en el quiosco ya te estás vendiendo.

-¿Qué aporta El Jueves al panorama general de esos quioscos?

-A.: Hay gente que quiere dibujar en El Jueves gratis. Es como un periódico para la gente que no lee el periódico, una manera de que la gente joven se entere de las cosas. Hay un análisis de mercado que dice que la mayoría de sus lectores tienen unos 20 años. Con 30 ya la dejas.

-Usted, Kalvellido, sin embargo, suele trabajar para Internet. ¿Hay muchas diferencias sobre el papel?

-K.: En Internet no tienes control sobre tu trabajo. Cualquiera lo puede coger, ese control no existe. También llega a más gente, se supone.

-Con esta primera exposición se abre una línea de trabajo en común.

-K.: Esto es una novedad. Llevábamos 10 años en contacto, incluso 20, y no nos conocimos hasta hace dos meses.

-A.: Antes nos carteábamos, o sea, que nos conocemos desde antes de que existiera Internet.

-¿Satisfechos por el resultado?

-A.: Tenemos estilos complementarios. Él le da un sentido diferente, así que si lo fichan en El Jueves, a mí por lo menos no me echan...