Toulouse se sumerge en el arte de un Barceló casi adolescente e inédito
La muestra, que se expone en Les Abattoirs, recoge las obras realizadas por el artista español entre 1973 y 1982
TOULUSE (FRANCIA) Actualizado: GuardarEl Museo Les Abattoirs de Toulouse exhibe desde ayer las primeras obras de Miquel Barceló, realizadas entre los años 1973 y 1982, en una retrospectiva dedicada al artista español antes de que alcanzara el reconocimiento internacional con su participación en la Documenta de Kassel.
La exposición Barceló avant Barceló (Barceló antes de Barceló) presenta hasta el 28 de febrero más de 100 obras inéditas de «esta fase experimental y fértil de un joven artista», señaló el director del museo galo, Alain Mousseigne.
El recorrido por la creación artística de un casi adolescente Barceló se diseña a través de seis secciones temáticas con un amplio espacio para el arte conceptual, la poesía visual, la figuración expresionista y la abstracción de la materia.
Las obras propuestas en Bestiario, Vanitas, Poesía experimental, Libros, Retratos y autorretratos y Elementos del paisaje desvelan características importantes del trabajo posterior del artista, como su pasión por la materia y su transformación, el cuestionamiento de la pintura o la iconografía de su medio ambiente, como el mar o su taller.
Mousseigne recordó la historia de amor entre el mallorquín y la ciudad francesa, que comenzó en 1982, cuando Barceló ofreció en la galería Axe Art Actuel de Toulouse su primera exposición en el extranjero. La exhibición, que fue expuesta en la Fundación Pilar i Joan Miró de Mallorca el pasado verano, introduce algunas diferencias, pues pone en perspectiva sus orígenes con obras realizadas a posteriori.
En este sentido, Mobili (2001), Elephant dret (2007), o Sans título (2008) permiten la transición entre las diferentes secciones de la exhibición, con creaciones como Persecució nocturna a la periferia de la ciutat (1981), Cadaverina 15 (1976), o Buenas noticias (1982).
Arte inédito
El también comisario de la muestra e historiador del arte, Jaume Reus, destacó de este período de casi diez años «la cantidad de obras inéditas que en él aparecen». «Muchas de ellas son de la colección privada del propio artista y ya nos hablan de cómo Miquel Barceló, antes de ser conocido y de que tuviera una definición estilística más definida, ya había devorado toda una serie de lenguajes y prácticas paraconceptuales y conceptuales, de land-art y expresionismo», explicó Reus.
La directora de la Fundación Pilar i Joan Miró, Madalena Aguiló, comentó que el artista multidisciplinar es «un caso paradigmático de alguien muy seguro de sí mismo». «Desde los 16 años, Barceló estaba muy convencido de alcanzar sus metas, dentro de su personalidad muy introvertida», indicó.
«Resulta muy curioso que a una edad tan temprana pudiera formular toda una serie de obsesiones, que han persistido hasta la actualidad, como el autorretrato o la experimentación con la materia que deriva hacia la reflexión sobre el paso del tiempo, un tema barroco que Barceló lo asume totalmente y que resulta uno de los temas principales de su obra», agregó Aguiló.
Para arropar al artista mallorquín, Les Abattoirs muestran en las salas de su exposición permanente otros importantes nombres españoles, como Pablo Picasso, Salvador Dalí, Antoni Tapiès o Antonio Saura, al que el museo dedicó una retrospectiva el pasado año.
Después de su periplo por Mallorca y Toulouse, Barceló antes de Barceló se exhibirá en el Centro Santa Mónica de Barcelona entre el 14 de julio y el 3 de octubre del 2010.