La dirección de Vicasa y la plantilla llegan a un acuerdo para el cierre
La multinacional francesa aceptó anoche la propuesta del comité de empresa y mantendrá a 41 empleados en la planta de Jerez Los trabajadores quemaron palés y cortaron el tráfico
JEREZActualizado:La columnas de humo negro que se elevaban ayer a primera hora de la mañana desde la fábrica de botellas de Jerez y el nerviosismo de la plantilla por la actitud de la dirección de Vicasa en la última reunión del viernes no hacían presagiar que al final del día pudiera concluir con el esperado acuerdo en torno al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para el cierre de la planta.
Sin embargo, a última hora de la tarde, los líderes sindicales de CC OO y UGT en Jerez, José Manuel Trillo y Pedro Alemán, recibían la llamada telefónica en la que el presidente del comité de empresa, Antonio Alba, les comunicaba que la mesa de negociación había llegado a un preacuerdo que pondría fin al conflicto y permitiría ejecutar el cierre que ninguno de los empleados quería, pero que han tenido que asumir y para el que querían garantizarse las mejores condiciones.
Y esas condiciones que los miembros del comité lograron arrancar ayer a la dirección de la firma de vidrio pasan por cuestiones fundamentales como que el número de empleados que se mantendrán en Jerez para poner en marcha el anunciado centro logístico de Saint Gobain será de 41 personas, una cifra muy cercana al medio centenar de empleados que los representantes de la plantilla han defendido estos días.
Del mismo modo, el presidente del comité explicó ayer a todos los empleados y familiares que habían pasado todo el día en las instalaciones de la fábrica a la espera de noticias que sólo 26 de los 124 trabajadores fijos de la planta serán trasladados al centro de Alcalá de Guadaira (Sevilla), «por lo que ninguno saldrá de Andalucía». Además, todos los que tengan que marcharse a trabajar a la provincia vecina recibirán cada mes, y durante todo el tiempo que dure su traslado al centro sevillano, un complemento de 250 euros.
Desmantelando la fábrica
Otros tres empleados más se quedarán por el momento en Jerez, y ayudarán al desmantelamiento de la planta, pero tendrán que marcharse a Sevilla si es necesario cubrir bajas en aquel centro de producción.
También hay satisfacción entre la plantilla en lo que respecta a las prejubilaciones, que ha sido uno de los escollos de la negociación y el principal motivo por el que la dirección de Vicasa no quiso dar su brazo a torcer el viernes y ayer por la mañana solicitó un receso hasta las 17 horas para estudiar posibilidades.
Y es que al final serán 44 los trabajadores que se prejubilen, todos los mayores de 55 años, y lo harán cobrando el mismo sueldo que tenían cuando estaban en activo, ya que la empresa ha accedido a pagar todos los complementos del plan social. Del mismo modo, cuando lleguen a los 65 años y les toque jubilarse lo harán también con la pensión máxima, ya que la empresa abonará todas las cotizaciones a la Seguridad Social hasta ese momento.
Este acuerdo, que deberá ser ratificado el lunes en asamblea por todos los empleados y que empezará a ejecutarse en unas semanas, sirvió para calmar los ánimos de los trabajadores y familiares que desde primera hora de la mañana se habían reunido en la fábrica y que en un intento de presionar a los negociadores quemaron decenas de palés en las calles que rodean a la planta, que tuvieron que ser cortadas al tráfico. La situación no pasó a mayores pese a que los bomberos tuvieron que intervenir en varias ocasiones para apagar los incendios, pero los trabajadores no abandonaron su encierro, ni siquiera tras conocer el acuerdo, e incluso acamparon anoche en el recinto.