Empleo sólo garantiza que «no habrá despidos forzosos» en el cierre de Vicasa

Tras el mazazo, la desolación y la impotencia que supuso para los trabajadores de la fábrica de botellas de Saint Gobain-Vicasa conocer que ya no había más camino que el cierre, ayer todos los empleados, y en especial el comité de empresa, trataron de sobreponerse y tirar hacia adelante para morir matando y conseguir al menos que las prejubilaciones y los traslados sean lo menos traumáticos posible.

«Ahora toca lo más difícil, lograr las máximas garantías para los que se queden en el centro logístico y las mejores condiciones para los que se vayan», apuntaba el presidente del comité, Antonio Alba, en un receso de la reunión de más de cuatro horas que mantuvieron ayer por la mañana con la dirección de la multinacional francesa y el bufete Garrigues Walker, y que tuvo su continuación por la tarde.

Lo que los trabajadores piden después de tantos y tan continuos bandazos es que «haya garantías» más allá de las que prometió ayer el consejero de Empleo, Antonio Fernández, que fue quien tuvo el dudoso honor de comunicar el martes a los aún esperanzados trabajadores de la fábrica de vidrio que el cierre era irrevocable.

Yes que al día siguiente de la constatación de que era el final del camino para la producción de botellas, Fernández sólo pudo afirmar que Vicasa seguirá vinculada a Jerez, si bien con un cambio de su actividad, y apenas pudo garantizar que «nadie será despedido en contra de su voluntad».

El consejero quiso ayer hacer hincapié en que se ha conseguido cambiar el cierre previsto de la fábrica por un cambio de actividad, algo que la multinacional ya había dejado claro a otras instituciones –como el Ministerio de Industria– y a los miembros del comité.

Del mismo modo, Fernández señaló que los trabajadores ya han sido informados de que el cierre está justificado en razones técnicas, organizativas y productivas, argumentos que tienen «difícil contestación técnico y jurídica», puesto que «nos guste o no, es un precepto que la ley ampara», pese a que hace apenas unas semanas le pedía a la plantilla que preparara un informe con datos técnicos para rebatir el de la multinacional que los representantes sindicales sólo pudieron entregarle en la cita en Sevilla del pasado martes.

Pero el consejero, como la plantilla, ya sólo quiere mirar al futuro y por eso recordó que en las negociaciones mantenidas con la empresa –y en las que se ha implicado el ministro del Interior y diputado por Cádiz, Alfredo Pérez Rubalcaba– se ha conseguido cambiar el cierre por una nueva actividad, lo que permitirá acoger a un «número importante» de trabajadores, y aseguró que habrá medida sociales y de empleo y «nadie será despedido en contra de su voluntad».

A partir de ahora, y para culminar el proceso abierto con el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), Vicasa tendrá que presentar un procedimiento concursal para limpiar sus activos y realizar las quitas correspondientes, ya que no se puede cargar todo «al esfuerzo público», si bien el consejero de Empleo indicó que el convenio de acreedores se hará con acuerdo previo de las partes, por lo que no se prevén problemas en su resolución.

Siguen las protestas

En esta tesitura, mientras continúan las protestas de la plantilla –hoy sin ir más lejos hay convocada una nueva jornada de paro general en la fábrica–, fue el comité de empresa el que dio ayer el paso de poner sobre la mesa una propuesta en la que instan a la dirección de Vicasa a que amplíe a 54 el número de trabajadores que podrán quedarse en Jerez por las necesidades de la nueva actividad que se creará en el centro logístico, y que incluye una línea de reescogido, un taller de moldes, un departamento para crear las etiquetas sleeve (fundas de las botellas) y un taller de reparación de máquinas de control.

Del mismo modo, la petición de los representantes sindicales pasa porque «haya verdaderas garantías, y recogidas por escrito» de que la nueva actividad tiene vocación de futuro y no es «un intento de salir del paso para a la vuelta de unos años volver a plantear un cierre», apuntaba Alba.

Sin embargo, en todo el día de ayer la empresa no respondió a esta petición ni dio nuevos detalles, y se limitó a redefinir todo lo relativo al centro logístico. Habrá que esperar a la nueva reunión de hoy para ver si hay avances.

ppacheco@lavozdigital.es