Una banda de narcos puso sus coches de lujo a nombre de jubilados sin carné
Golpe de la Guardia Civil al sistema de blanqueo de 'los chicos del Marqués', detenidos en Sanlúcar en junio
| CÁDIZ Actualizado: GuardarJubilados sin carné que aparecían en los papeles como propietarios de coches de lujo como un BMW X5 o parados que cobran el subsidio pero que ostentan un patrimonio que incluye Mercedes valorados en más de 40.000 euros. Estas personas eran piezas de un engranaje financiero ideado supuestamente para blanquear los pingües beneficios que llegó a obtener la banda del Marqués; una de las redes de narcotráfico más potentes que operaba en Sanlúcar hasta el mes de junio, cuando once de sus miembros fueron detenidos por la Guardia Civil. La operación se bautizó con el nombre de Q7 y como las películas, ha tenido una segunda parte.
En esta fase de la investigación que ha llevado a cabo la Policía Judicial de la Comandancia de Cádiz, los agentes se han centrado en desmantelar el patrimonio amasado por los chicos del Marqués -apodo de uno de sus cabecillas, un histórico del negocio que estaba siendo buscado por la Audiencia Nacional desde 2001-. Estos traficantes llegaron a reunir un capital en bienes que la Guardia Civil ha valorado en 3,5 millones de euros. Para lavar ganancias de origen ilícito aplicaron la regla básica: los miembros de la banda no tenían nada a su nombre. Recurrieron en su mayoría a sus propias familias, que ahora han caído también en esta secuela de la operación policial.
13 arrestados
Novias, abuelos y padres han sido apresados a lo largo del mes de octubre por ayudar a enjuagar el dinero que obtenía la banda a través del narcotráfico. En total 13 personas que tras pasar a disposición judicial han quedado en libertad con cargos. Golpes policiales como éste responden a la demanda de los colectivos antidroga, que llevan años reclamando que se intervengan los patrimonios de los narcos para complicarle su regreso al negocio cuando salen de prisión; atacando así, a donde más le duele: el dinero. La Guardia Civil confirmaba también el arresto de un empresario cuya firma también servía de testaferro de las propiedades de los narcos.
Las anomalías detectadas por los agentes en el estado financiero de los implicados son burdas y pusieron rápido sobre la pista al equipo especializado en blanqueo de capitales del Instituto Armado. La familia de Antonio R. R., alias El Marqués, declaraba unos ingresos de tan sólo 1.050 euros mensuales. Con estos datos se estaría ante unos vecinos en crisis, pero la realidad era otra: en sólo tres años habían aumentado sus propiedades hasta alcanzar un valor líquido de 895.000 euros, según la Guardia Civil.
La ostentación pública que suelen hacer los narcos afincados en la zona, viviendo en mansiones, conduciendo en coches sólo aptos para ricos y manteniendo un ritmo de vida imposible para desempleados o personas con pocos recursos, como hacen constar en sus declaraciones al fisco, ha sido su perdición. En el caso de los chicos del Marqués, su patrimonio no ha quedado intacto.