Doloroso retras o
Actualizado:El ritmo con que está avanzando la investigación del accidente del vuelo de Spanair que el 20 de agosto de 2008 costó la vida de 154 personas quedó corroborado con el anuncio, casi 15 meses después del siniestro, de la constitución de la comisión independiente requerida por la autoridad judicial para dilucidar las causas de la tragedia. Es difícil evaluar si podría haberse evitado el camino para conformar el equipo de expertos al que se ha enfrentado el juez Javier Pérez, con negativa incluida a colaborar de la Agencia Europea de Seguridad Aérea por supuesta falta de competencia. Lo que resulta obvio es que la demora sólo contribuye a prolongar el caso, para desespero de los familiares de las víctimas. El carácter preliminar del informe confeccionado por la Comisión de Investigación de Accidentes de Aviación Civil tampoco ha permitido cerrar el proceso y alcanzar conclusiones.