Mijail Gorvachov y Helmut Kohl pensaban que la caída del muro era un «tema para el siglo XXI»
Con motivo del vigésimo aniversario de la reunificación de Alemania líderes de todo el mundo se dan cita en Berlín
BERLÍNActualizado:Con motivo de los actos del vigésimo aniversario de la caída del muro de Berlín, líderes de todo el mundo se dan cita en la capital alemana para conmemorar aquel acontecimiento que cambió el rumbo de Europa y del mundo.
El presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, ha destacado que esta fecha coincide con un momento crucial para la integración europea. Tras la reciente ratificación del Tratado de Lisboa por todos los Veintisiete, "estamos a punto de entrar en una nueva era para la UE ampliada". Según Barroso, la Unión Europea de hoy -más eficiente, más democrática y con más peso en el mundo- no habría sido posible sin el levantamiento del telón de acero y la caída del Muro de Berlín. ha destacado el papel de los "hombres y mujeres que se opusieron en las calles a los gobiernos totalitarios, que pidieron el cambio democrático (...), movilizaron a otros y extendieron su deseo de libertad a través de las fronteras". Para Barroso, 1989 es el año en el que "los muros dejaron de ser una barrera y volvió la libertad".
La canciller alemana, Angela Merkel, ha defendido que el "derribo de los muros" que aún quedan en el siglo XXI depende de la disponibilidad de los Estados de transferir competencias a los órganos internacionales "cueste lo que cueste". Ha señalado que la caída del Muro, hace hoy veinte años, cambió la polarización política mundial y abrió la puerta al sistema multipolar vigente hoy en día. "Sólo con un orden global y con cooperación multilateral es posible una convivencia pacífica", ha señalado Merkel quien ha instado a los Gobiernos de los países industrializados a colaborar "cada vez más" con las naciones emergentes como la India y China.
En su discurso del acto conmemorativo, la canciller afirmó: "El día de hoy, hace veinte años, fue un hito feliz en la historia de Alemania", para recordar a continuación que tal momento no habría sido posible "sin la ayuda generosa de nuestros aliados". "Celebramos el valor y la voluntad inquebrantable de miles de personas en la RDA pero también celebramos las transformaciones de nuestros amigos en el este y el centro de Europa que prepararon la caída del muro". "Sabemos también lo que le debemos a Mijail Gorbachov y a su política de apertura en la Unión Soviética y a la política serena de Helmut Kohl y Hans Dietrich Genscher".
El ex presidente soviético Mijail Gorbachov ha señalado que la caída del Muro de Berlín fue un acontecimiento que era previsible debido al auge del movimiento democrático y revolucionario pero ha admitido que "falló como adivino" pues creyó que iba a ser un asunto del siglo XXI. "Naturalmente se podía intuir que algo iba a pasar. Estaba en el ambiente. Prácticamente todos los días en 1989 discutíamos sobre el futuro de Berlín y sobre el futuro de Alemania", "sin embargo, tanto Helmut Kohl (ex canciller alemán) como yo fallamos como adivinos. En la primavera del 89 en una conferencia de prensa nos preguntaron sobre la reunificación alemana y ambos dijimos que ese era un tema para el siglo XXI", ha recordado el ex gobernante.
El presidente alemán, Horst Köhler, ha recordado ante líderes de todos los países miembros de la UE y de otros países amigos los acontecimientos que llevaron al 9 de noviembre de 1989 cuando "la gente bailó sobre el muro de Berlín y el mundo cambió". "Durante décadas, la gente ni siquiera podía acercarse al Muro de Berlín. Esa noche, la gente bailó sobre el muro y el mundo cambió". "En toda Alemania la gente se abrazaba y pensaba en toda la gente con valor, con perseverancia y sin violencia que había hecho posible una revolución pacífica en Alemania".
El presidente estadounidense, Barack Obama, ha reclamado a Alemania, Europa y el mundo mantener encendida la luz de la libertad con motivo del 20 aniversario de la caída del Muro de Berlín. "Mantengamos encendida la luz de la libertad en las noches mas oscuras de la tiranía", decía Obama en un vídeo mensaje que fue proyectado en varias pantallas ante la Puerta de Brandeburgo en los actos conmemorativos de la caída del muro que dividió la capital alemana.
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha elogiado la lucha pacífica por la libertad y por la democracia que desembocó hace veinte años en la caída del muro de Berlín y ha pedido que nadie pierda de vista que "hay otros muros en el mundo que también deben caer". "Nosotros también habíamos tenido una caída reciente del muro propio que tuvimos durante cuarenta años, un muro pesado, una losa muy muy dura para nuestra historia" y "sabíamos lo que significaba la libertad, lo teníamos muy vivo en la carne", ha manifestado.
El ex ministro alemán de Exteriores, Hans Dietrich Genscher, ha señalado que los ciudadanos de Europa, del Este y el Oeste, nunca estuvieron tan cercanos y unidos como cuando se produjo ese acontecimiento. "No deberíamos olvidar jamás que los pueblos de Europa nunca estuvieron tan cercanos unos de otros como en el otoño de 1989. Entonces éramos todos europeos que nos dábamos la mano", ha dicho Genscher al recibir el Premio de la Deutsche Gesellschaft (Sociedad Alemana) por sus méritos para el entendimiento alemán y europeo. Ha añadido que la unidad alemana no debería verse gravada "con una nueva discusión sobre política financiera entre el este y el Oeste" y ha subrayado que "nadie llegó a la unidad de Alemania con las manos vacías".
El presidente de la República de Portugal, Aníbal Cavaco Silva, ha destacado que la caída del Muro de Berlín fue uno de los elementos que permitió la evolución del proceso de integración europea, que es "ejemplo particularmente elocuente de los caminos que la caída del Muro permitió crear, en favor de una Europa finalmente reconciliada consigo misma". El jefe de Estado luso ha asegurado que este 20 aniversario debe ser "un momento de reconfirmación" de los ideales que llevaron al derrumbamiento del "muro de la vergüenza" y ha apuntado que este "símbolo" es de aquellos que "marcan y determinan el sentido de la historia".
El músico argentino-israelí Daniel Barenboim ha recordado los pogromos nazis del 9 de noviembre de 1938, antítesis "monstruosa" al aniversario de "la noche más feliz de Berlín" y también los "otros muchos muros que quedan por derribar", incluido el que separa a palestinos de israelíes. "La fecha del 9 de noviembre representa a la vez lo más monstruoso y lo más feliz de la historia reciente alemana", ha dicho el director y pianista en una rueda de prensa horas antes del concierto que dirigirá ante la Puerta de Brandeburgo en el vigésimo aniversario de la caída del Muro y que pretende trazar un puente entre ambos aniversarios.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha asegurado que la caía del muro de Berlín hace veinte años "cambió el curso de la historia y simbolizó el triunfo de la gente corriente en la búsqueda de la libertad". "La caída del muro nos recuerda "el bien que puede lograr la gente, ya sea en la lucha por los derechos humanos en 1989 o en los esfuerzos en el siglo XXI para eliminar la pobreza, alimentar a los hambrientos y combatir el cambio climático".