Mario Bermejo no paró de correr durante todo el partido, aunque se quedó sin gol en Pucela ante el Real Valladolid. / PÉREZ
EL SEGUIMIENTO DIEGO COSTA MARIO BERMEJO

Poco arsenal para una guerra fría

Mario Bermejo y Diego Costa tuvieron poco protagonismo en el césped del Nuevo Zorrilla en un encuentro marcado por la falta de ocasiones de gol

JEREZ Actualizado: Guardar
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Tan sólo cuatro ocasiones en 90 minutos. Un dato para tener en cuenta y que deja a las claras lo que ya se sabía: que tanto Valladolid como Xerez tienen serios problemas para hacer gol. Ayer se encontraban en el césped de Zorrilla dos jugadores que llegan a la Primera División bien respaldados por los goles conseguidos temporadas atrás en Segunda División. Diego Costa y Bermejo apenas tuvieron protagonismo ayer en el feudo pucelano. Tan sólo el brasileño fue capaz de meter miedo en el cuerpo xerecista. En el minuto 54, el brasileño tuvo un mano a mano clarísimo que solventó su compatriota Renan con una gran parada.

Sin embargo, la primera parte ay marcó en parte el devenir del encuentro. El ejemplo más claro es que el primer remate a puerta llegó en el minuto 45, justo antes del pitido que mandaba a los jugadores al túnel de vestuarios. Fue Mario Bermejo, en su primera intervención dentro del área rival, quien con una chilena abrió el marcador de remates a puerta.

Y es que el delantero cántabro del Xerez anduvo los primeros 45 minutos muy lejos de Justo Villar. Bermejo, con poca ayuda de Maldonado -perdido entre líneas- no llegaba a liberarse de la marca de Nivaldo, mientras que Diego Costa andaba ausente tanto en el centro como en banda. El brasileño no intervino apenas en la primera mitad y caía muy rápido en el fuera de juego. Una postura que cambió por completa en la segunda mitad. Con el paso de los minutos, Costa cobró protagonismo con sus caídas a la banda derecha xerecista. Un protagonismo que perdió por completo el cántabro, muy fundido con el paso de los minutos y pidiendo a gritos un descanso. Al final, empate a goles entre los dos arietes.