Cae el muro de la discordia
Paralizan la obra de la rampa del mirador, justo cuando los vecinos comenzaban a recoger firmas contra ella
ARCOS Actualizado: GuardarHacer que el conocido mirador de Andalucía, de la Plaza del Cabildo, sea accesible a los minusválidos, era la intención inicial de un proyecto que ha muerto justo cuando la polémica estaba a punto de servirse. Una intención loable que se ha encontrado con un nefasto proyecto que ha estado a punto de deslucir la imagen de una de las localidades más bellas de la provincia.
En concreto, el Ayuntamiento ordenó levantar un muro para implantar una plataforma de acceso para minusválidos. Éste, ya en construcción, contaba con más de un metro de altura, y que según los vecinos de la zona, suponía poner una pantalla en pleno corazón histórico, turístico y cultural de la Ciudad Monumental. Circunstancias que han sido suficientes para que los colectivos sociales de la zona se estuvieran planteando la recogida de firmas para exigir la paralización del proyecto y que ha terminado con la orden de la alcaldesa, Josefa Caro (PSOE), para que se derribe el muro y se ponga en marcha un acceso para minusválidos alternativo.
Caro aseguró que la obra «no se adecua al espíritu que debemos preservar en cuanto al patrimonio monumental que supone nuestro Conjunto Histórico», además añadió que podría desvirtuar la imagen y esencia del patrimonio de la localidad. En su lugar, y para salvar la barrera arquitectónica, la mencionada rampa de obra será sustituida por una de madera, tratando de este modo de provocar el menor impacto visual.
La regidora anunció que se demolerá lo que ya se había construido y que se instalará nueva rampa. «No va a suponer un desembolso extra, gracias a la buena disposición de la empresa contratista», matizó.
Responsabilidad
El concejal y portavoz del grupo municipal AiPro, Manuel Erdozain, se encontraba ayer comprobando el estado en el que estaba la actuación. Al respecto defendió que su grupo pedirá responsabilidad al Ayuntamiento porque «esta obra atenta contra el patrimonio del municipio, algo que no se puede consentir», aseveró.
Erdozain lamentó que se haya gastado el dinero del ciudadano «en un muro que ha tenido que derribarse por la poca previsión del Gobierno local».
También esperó que todo el daño que se ha causado se pueda restaurar, haciendo referencia a la eliminación de los escalones que daban acceso al mirador y a los agujeros que sobre los muros se han tenido que hacer para su extracción.