Dos casos mediáticos y un mismo juez
'Gürtel' y 'Pretoria' comparten negocios urbanísticos pero hay muchas diferencias
MADRIDActualizado:Gürtel y Pretoria comparten, al menos en primera instancia, el mismo juez instructor, Baltasar Garzón, y también coinciden en notoriedad mediática, la fuerte implicación de políticos municipales, las marañas de empresas para opacar operaciones irregulares y los enormes beneficios por los pelotazos urbanísticos que se supone que terminaron en paraísos fiscales. Sin embargo, ambos casos tienen muchas diferencias entre sí, más allá de que las investigaciones estén en manos de cuerpos policiales diferentes.
El origen de ambas investigaciones no tiene nada que ver. La trama catalana apareció de rebote cuando se revisaban hace siete años las grandes fortunas españolas con inversiones en las Islas Jersey. La red que dirigía Francisco Correa la destapó la confesión y las grabaciones de un ex concejal madrileño. Los millones de euros escondidos en los paraísos fiscales por el empresario y los suyos aparecieron mucho después, conforme avanzaban las pesquisas.
Pretoria es una trama nacida del pelotazo inmobiliario casi al cien por cien y en la que los concursos de servicios amañados son una parte ínfima del pastel. 'Gürtel' no surgió como una red de pingües negocios urbanísticos, aunque en su recta final tomó unas dimensiones sin parangón gracias a los negocios constructores en la Comunidad de Madrid y Castilla y León. En principio Gürtel se nutría sólo de ganar concursos de administraciones populares y del propio partido. Luego se reinventó en el sector inmobiliario, en la que no era una especialista.
Envergadura
La geografía y la envergadura son otras diferencias sustanciales. La trama que tenía su epicentro en Santa Coloma estaba radicada sólo en tres municipios barceloneses y se basaba en los contactos con responsables consistoriales. La red Correa salpica ya a cuatro comunidades, Madrid, Valencia, Castilla y León y Galicia, y entre los imputados e implicados hay concejales, alcaldes, consejeros autonómicos, un presidente de comunidad, diputados regionales, un diputado nacional, un senador y un eurodiputado. En Gurtel, en total, son unos 70 los imputados; en Pretoria, por ahora, no llegan a diez.
La sombra de la financiación ilegal de partidos planea sobre la trama que salpica al PP. La Brigada de Blanqueo apunta supuestos desvíos de fondos a los populares valencianos y gallegos. En Cataluña, en cambio, es un grupo corrupto en el que sólo aparecen comisiones para el bolsillo personal de los implicados.