Todos los santos
Actualizado:Halloween se celebra el 31 de octubre porque es una fiesta católica. Su nombre significa precisamente Víspera de Todos los Santos, la fiesta que el Papa Gregorio III (731-741) trasladó desde mayo al primero de noviembre con ocasión de la dedicación de la capilla de San Pedro para las reliquias de los Santos Apóstoles y todos los santos, mártires y confesores, y de todos los justos. Esta fue en principio una fiesta sólo local, de la diócesis de Roma. Cien años después, Gregorio IV (827-844) la declara fiesta universal. Pero antes hablábamos del nombre. Hallow en inglés antiguo viene a significar algo así como aquello que es venerado. La partícula Eve es una abreviatura de evening -víspera- , así que la Víspera de Todos los Santos es All Hallows' Eve, que en inglés antiguo se contrae en Hallowe'en. La fiesta que vemos actualmente, y que provoca por gamberradas Juicios de Faltas en los Juzgados, es una tradición que se fragua en Norteamerica pero con ingredientes irlandeses, ingleses y franceses, todos católicos. La literatura neopagana nos habla en cambio de la fiesta del Samhain como una de las grandes del año celta, y es cierto. Lo demás forma parte de la invención. Situarla el 1 de noviembre en correspondencia con el calendario celta, aparte de escamotear la verdad del origen de la fiesta cristiana, no tiene fundamento, entre otras cosas porque del calendario lunisolar celta se sabe más bien poco. Algunos apuntan más bien a las fechas en torno a los días 7 al 11 de noviembre para el Samhain, fiesta de carácter agrícola-ganadero semejante al San Martín cristiano, fiesta de matanza y aprovisionamiento para el invierno. No faltan quienes establecen una relación posible entre el Samhain y el culto a los muertos, aunque sin bases históricas. No obstante, en la primitiva ubicación de Todos los Santos en mayo estaba el intento de superación de los paganos festivales de las Lemuria, en los que se practicaban ritos de exorcismo y se honraba a los muertos. Ello lleva a pensar en un fondo pagano que se esconde tras la celebración precristiana, paganismo que incluso esconde elementos relacionados con el culto satánico, que celebraría el día 1 de noviembre de modo especial.