El Valladolid fustiga al Dépor
El equipo castellano ha ganado en casa tras siete meses de sequía (4-0)
Actualizado:Los gallegos salieron inicialmente seguros atrás y con cierto aplomo en medio campo. Tuvieron dos opciones de marcar antes de que el Valladolid "golpeara" en serio en un buen pase del uruguayo Canobbio que aprovechó Nauzet Alemán para abrir el marcador.
Nestor Fabián Canobbio puso la luz al juego de un Valladolid hasta entonces espeso, aunque hoy tenía enfrente a uno de esos equipos que inexplicablemente se le dan bien. La estadística, en este caso, no sabe de razonamientos.
El Valladolid adquirió confianza y vigor tras el gol, empezó a presionar y a llegar muy en serio arriba. Entonces el Dépor, que llegaba a Zorrilla embalado, aparentó aturdimiento y confusión, tal vez porque se hallaba en un estadio que siempre ha sido "territorio comanche" y donde casi nunca ha ganado. Cosas del fútbol. De nuevo Canobbio, en una notable acción individual, pudo decidir el partido de no ser por una espléndida parada de Dani Aranzubía (min. 42), que salvó el 2-0 con una mano providencial.
El Deportivo empeora
Al descanso, el Valladolid pudo llevarse un botín mayor, pero no tardó en obtenerlo tras la reanudación. Después de una jugada de Marquitos por la banda izquierda, de nuevo Nauzet batió a Aranzubía. Se cumplía el primer minuto de la segunda parte y los de Mendilibar ya se veían ganadores, pero Juan Rodríguez, con una lanzamiento al poste, avisó de que el Dépor aún tenía algo que decir.
Fue entonces cuando Miguel Ángel Lotina echó el resto. Valerón y Lassad salieron del banquillo en plan acometedor, pero de nuevo fue Aranzubía el que evitó un tanto local al desviar un disparo de Fabián Canobbio, el mejor del Valladolid pese a los dos tantos de Nauzet.
Con el Dépor volcado y muchos espacios para el contragolpe, fue Diego Costa, con su potencia y velocidad, el que más disfrutó sobre el terreno de juego. Ya en ese momento, el Valladolid había perdido su gobierno total del medio campo y el encuentro era un carrusel ofensivo que giraba para uno u otro lado sin control alguno.
Hubo ocasiones para ambos, pero fue Diego Costa quien aprovechó un fallo de Manuel Pablo para establecer el 3-0. Aún hubo más noticias ofensivas del Valladolid en un golazo del bosnio-holandés Haris Medunjanin que redondeó la tarde y certificó el 4-0 definitivo.