Piden 18 años de inhabilitación para el juez Calamita por «homófobo»

La conducta del juez Ferrín Calamita, condenado por retrasar de forma «maliciosa» el trámite de adopción de dos lesbianas, supuso una «contradicción grave» contra el ordenamiento jurídico y reveló una «clara condición homófoba». Así de contundente se mostró ayer el fiscal en la vista celebrada en el Tribunal Supremo para revisar la pena contra el juez. El Tribunal Superior de Justicia de Murcia condenó a Calamita a dos años, tres meses y un día de inhabilitación y 6.000 euros de indemnización.

Tanto el fiscal como la acusación particular, que representa a una de las afectadas, pidieron que elevara hasta 18 años la suspensión del juez, al que acusan de un delito de prevaricación. Para la acusación, el magistrado dictó ocho resoluciones injustificadas porque se trataba de una pareja de mujeres.