Pakito mantuvo un encuentro «casual» con Pertur el día de su desaparición

El ex dirigente etarra Francisco Mújica Garmendia, Pakito, imputado por su presunta participación en la desaparición de su compañero Eduardo Moreno Bergaretxe, Pertur, visto por última vez en 1976 en la localidad francesa de San Juan de Luz, negó ayer en su comparecencia ante el juez que estuviera detrás del presunto asesinato y apuntó a la posible autoría de sectores de la extrema derecha.

Fuentes jurídicas presentes en el interrogatorio explicaron que Pakito recordó que en aquella época comenzaron a producirse una espiral de «atentados» contra integrantes de ETA político-militar perpetrados por grupos parapoliciales españoles y sectores de la extrema derecha. Esta teoría fue asumida en un primer momento por los polimilis, sector al que pertenecía Pertur. Incluso, una organización ultraderechista, la denominada Alianza Anticomunista Triple A, llegó a atribuirse la desaparición del etarra. Con el tiempo, sin embargo, la familia de Pertur, y también los polimilis, señalaron a los berezis, facción de los polimilis que se pasó a ETA militar, de ser los responsables de los hechos.

Pakito, que declaró durante una hora, reconoció ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu que el día de los hechos, el 23 de julio de 1976, mantuvo un «encuentro casual» con Pertur en la localidad francesa de San Juan de Luz y, posteriormente, trasladó a su compañero en coche hasta Behobia junto al también dirigente etarra Miguel Ángel Apalategui, Apala, quien se encuentra en paradero desconocido, aunque se sospecha que reside en Cuba. El testimonio de Mújica Garmendia, valedor en aquellos años de la estrategia militar de ETA en contraposición a los postulados políticos de Pertur, contradice el que expuso hace un año en este mismo proceso la que fuera pareja de Pertur, Lourdes Auzmendi, quien centró sus sospechas en Pakito y Apala, entonces integrantes de los comandos especiales de la organización terrorista, los denominados berezis.