El Chelsea hunde al Atlético

El Atlético fue víctima de los mismos fallos que le están condenando esta temporada. Los numerosos, continuos, infantiles y dramáticos errores defensivos. Desde su llegada al banquillo madrileño, Abel impuso un sistema de defensa adelantada, basado en el fuera de juego. Pero la estrategia es un coladero constante. En Londres, el técnico de Velada castigó a Juanito por la derrota en Pamplona y puso en su lugar al canterano Domínguez. También dejó en el banco a Jurado y confió en el tribote Assunçao, Cléber y Raúl García para el centro del campo.

Lo curioso es que el Atlético empezó el choque más asentado que de costumbre. Tras un primer susto de Belleti, los rojiblancos tuvieron ocasiones para adelantarse en el marcador. Carlo Ancelotti ya había avisado de los peligrosos arietes 'colchoneros'. Forlán y Agüero tuvieron en sus botas un par de ocasiones. Con una paciencia inusitada, los rojiblancos no rifaban la pelota desde la defensa como es habitual. Pero la leve mejoría en la construcción ofensiva se vio ensombrecida por la estrepitosa falta de concentración en la última línea, verdadero lastre del Atlético. Cada vez que el Chelsea atacaba las posibilidades de que uno de sus jugadores acabase en un mano a mano con Asenjo eran altísimas.

Kalou, el sustituto de Drogba, marró de forma incomprensible un tiro sólo ante el guardameta rojiblanco. El portero del Atlético volvió a ser el mejor de los suyos, con paradas de calidad. Pero el espejismo del empate duró lo que tardó la zaga en volver a pifiarla. Nuevo error en el fuera de juego que habilita a Cole por la banda derecha. El lateral centra y Kalou, sólo en el área, marcó a placer ante la pasividad de Domínguez y Antonio López.

Debacle

La segunda mitad se convirtió en una agonía para el Atlético. A los seis minutos de la reanudación Kalou marcaba el segundo tras cabecear, de nuevo sólo, un córner. Una consecuencia más de la ineficaz y sangrante defensa en zona que los de Abel realizan en cada jugada a balón parado. En ese momento se acabó el partido. Las pocas esperanzas rojiblancas se difuminaron. El Kun desaprovechó una ocasión sólo ante Cech, pero se entretuvo y no supo definir, en un claro reflejo del paupérrimo estado del Atlético.

Abel reaccionó con la entrada de Jurado y Maxi. Pero de poco sirvió. Lampard, con un derechazo desde fuera del área subió el tercer tanto al marcador. El esperpento concluyó con el gol en propia puerta de Perea. El Chelsea consiguió la tercera victoria.

El Atlético sigue último del grupo, con un punto y a la espera de un milagro para no caer eliminado.