La acusada dejó al gaditano en el área de Urgencias del Puerta del Mar. / LA VOZ
Ciudadanos

Piden tres años de cárcel para una mujer que estafó 20.000 euros a un anciano

Lo acompañó desde Alemania a Cádiz para poder extraer el dinero del banco y después lo abandonó en un hospital

CÁDIZ Actualizado: Guardar
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José María, la víctima de esta historia de estafa y engaños, era natural de Cádiz y tenía 70 años cuando murió sin dinero en la ciudad que lo vio nacer. Los últimos 35 años de su vida, sin embargo, los había pasado en Alemania, donde se marchó en la década de los setenta y donde vivió sin apenas dar señales de vida a sus familiares gaditanos.

Regresó de repente en enero del año pasado; enfermo, en silla de ruedas y acompañado de una mujer mexicana algo más joven que él, con la que había entablado una gran amistad y que desde un año antes había ejercido como su cuidadora. Ahora la Justicia española reclama a esta mujer, llamada Patricia R. T. de B., por haber estafado supuestamente 20.000 euros al gaditano, antes de abandonarlo en un hospital de Cádiz, donde murió un mes después.

La mujer -que regresó a Alemania- fue denunciada por unos sobrinos del anciano en Cádiz con los que éste había mantenido esporádicos contactos en los últimos años. Ellos le habían conseguido la pensión en España con la que el hombre había ahorrado los 20.000 euros. Y lo cuidaron en su último mes de vida en Cádiz. Según el escrito de acusación del fiscal, Patricia R. T. «consciente del deterioro de la salud» del anciano, «decidió apoderarse de forma ilícita» de estos fondos. Y para ello, «hizo diversas gestiones para obtener una tarjeta de crédito que le permitiese disponer del saldo de la cuenta bancaria», en una sucursal de Cádiz. Sin embargo, en la entidad dudaron de esta petición y la denegaron. Así que ella «decidió trasladarse desde Alemania hasta Cádiz».

Por Carnaval

Según el fiscal, que llegó a entrevistar al anciano poco antes de morir, la acusada había convencido al estafado de que viajaban a Cádiz para ver el Carnaval, aunque aún era Día de Reyes cuando aterrizaron. Al poco tiempo de llegar, la mujer y el anciano acudieron a la sucursal bancaria donde, «confuso y desorientado», el estafado solicitó los 20.000 euros en efectivo. Fue al día siguiente cuando retiraron el dinero, que -según el director de la sucursal- la mujer «guardó en su bolso». Después, se marchó de vuelta a Alemania.

Según el fiscal, ese mismo día la acusada había acudido a los servicios sociales para demandar una residencia para el anciano. Pero al no conseguirlo, lo ingresó en el servicio de Urgencias del Hospital Puerta del Mar alegando que sufría una parálisis. Desde el aeropuerto, antes de abandonar a sus supuesto amigo en el centro, llamó a los familiares de éste indicándoles dónde lo podrían encontrar. Y se esfumó.

El juicio contra la mujer estaba previsto para la próxima semana en la Audiencia Provincial gaditana. Pero la vista ha sido suspendida hasta febrero, porque al parecer, la acusada no podía viajar desde Alemania en la fecha.

El fiscal la acusa de un delito de estafa, por el que pide para ella una pena de tres años y seis meses de prisión. Además de exigir que devuelva a los herederos del anciano, los 20.000 euros que supuestamente se apropió.