Los mercados no se conforman

E l Dow Jones superaba la psicológica barrera de los 10.000 puntos al cierre de la sesión del miércoles por primera vez en los doce últimos meses. Pero este fenómeno, en lugar de motivar una fiebre compradora en Europa, ocasionaba un cierto vértigo, una cierta incertidumbre o una necesidad de más datos positivos para tener más argumentos para continuar con la tendencia alcista. Por esta razón, los indicadores del Viejo Continente estuvieron dudando entre los avances y las reducidas pérdidas durante toda la sesión. Durante la mañana sí se pudo observar una cierta inercia alcista. De hecho, en el caso del Ibex, esas intermitentes subidas lo llevaron por encima de los 11.900 puntos en algún momento de la primera mitad de la sesión. Pero el cierre tuvo un sesgo bajista. En el Ibex, el descenso fue de un 0,18% y dio un último cambio en los 11.849,70 puntos.

Las cuentas de Goldman Sachs y de Citigroup, que también batieron las expectativas del mercado, no emocionaron tanto a Wall Street, que comenzó la sesión ligeramente a la baja. Parece que JP Morgan había puesto muy alto el listón. El mercado se ha puesto exigente y no se contenta con cualquier cosa. Cada vez quiere más.

En Europa, la compañía finlandesa Nokia firmó muy malas noticias. Registró una pérdida neta de 622 millones de euros entre enero y septiembre. Los inversores se lo tomaron muy mal y su cotización se desplomó cerca de un 11%.