Los locales de la Plaza Mayor, seis meses sin venderse

A mediados de mayo de este año el gerente de Airesur, José María León, participaba junto al alcalde de Chiclana, José María Román, en la inauguración oficial del aparcamiento subterráneo que la promotora sevillana llevaba casi tres años construyendo en la Plaza Mayor, justo a unos metros de donde diseñó un edificio comercial que completaba la remodelación de este entorno en la ciudad.

Pues bien, a día de hoy, la empresa confirma que el nivel de ocupación de dicho estacionamiento «está muy por debajo de las previsiones que manejábamos cuando se elaboró el proyecto».

Y lo que es peor. Airesur reconoce que no ha logrado vender ni arrendar en alquiler ninguno de los veinte locales comerciales que se emplazan en el inmueble de uso comercial anexo.

Cuando a mediados de 2006 se iniciaba la ejecución del proyecto todo eran parabienes. Casi 3.000 euros el metro cuadrado era el precio de salida de dichos locales de oficinas y comercios al exterior. Era la época del boom inmobiliario y del ladrillo en la ciudad.

La crisis, afecta

En la actualidad, y en un contexto de crisis financiera internacional, ninguna gran firma apuesta por instalarse en un entorno privilegiado, con vistas a la Iglesia San Juan Bautistas y el Arquillo del Reloj, y ubicado a pocos metros del futuro Museo Briones municipal. Desde la empresa se insiste en culpar a «los retrasos del proyecto» de esta situación, y se apunta que «tras perder más de un año en el proyecto nos ha cogido el tren de la crisis», lamentan.

Actualmente el edificio comercial de la Plaza Mayor permanece desierto. Sus casi 1.455 metros cuadrados construidos de mole de hormigón pintado de blanco que provocó duras críticas de la oposición «por su falta de integración arquitectónica en el entorno», y que está formado por dos plantas, con 9 locales en la planta baja y 11 en la primera, que tienen entre 200 y 205 metros cuadrados, sigue esperando inquilinos, pero la cosa se complica. Airesur reconoce «negociaciones con grandes firmas que no han fructificado de momento».

En varios momentos se llegó a hablar de la implantación de algunas marcas comerciales muy conocidas como Zara, pero a día de hoy no hay nada cerrado al respecto. Además, el inmueble aún no cuenta con licencia municipal de primera ocupación, «lo que nos hace todavía más difícil sacarlos al mercado», apunta Airesur.

Tampoco está cerrada todavía la adquisición por parte del Ayuntamiento de alguna de las oficinas del edificio comercial de la Plaza Mayor para ubicar de dependencias municipales. Con este panorama, la promotora se muestra pesimista, y cree haber sido víctima de un cúmulo de circunstancias que han convertido su negocio prácticamente en una ruina.