Mucha soledad para demasiada solidez
El defensa del Málaga, Weligton, ganó la partida en la zona defensiva, no concediendo ninguna ocasión a Mario Bermejo, que luchó y peleó, pero apenas le llegaron balones
JEREZ Actualizado: GuardarEl delantero del Xerez Deportivo, Mario Bermejo, regresaba a la titularidad para enfrentarse al Málaga. El objetivo del cuadro azulino era conseguir abrir la lata de goles en Primera División y el ariete cántabro volvió a buscarlo, aunque sin éxito. En esta ocasión se tuvo que ver las caras sobre el césped de Chapín con el defensa central del Málaga Weligton. El xerecista y el malagueño se vieron muy de cerca durante los 94 minutos que duró el encuentro.
El brasileño se mostró sin fisuras en la retaguardia, ganando la partida una y otra vez sobre el delantero del cuadro azulino.
La soledad de Bermejo en la punta del ataque y los pocos balones que podía oler en la frontal del área también facilitaron, en buena medida, el trabajo a la defensa visitante. Además, el xerecista siempre que quería participar en el juego tenía que abandonar su posición, bajar hasta la zona media del campo y comenzar a tocar la pelota. Y cuando se trataba de balones en largo -la defensa del Xerez recurrió en muchas ocasiones al pelotazo largo- la envergadura de Weligton y la solidez del brasileño tanto por el juego aéreo como por el césped, acabaron alejando el peligro sobre la portería de Munua.
Precisamente, Bermejo no logró disparar entre los tres palos y sólo contribuyó a provocar una cartulina amarilla a Iban Cuadrado. Aunque no hay que quitar ningún mérito al ariete del Xerez, ya que como siempre luchó y peleó, pero la falta de ocasiones y el poco bagaje ofensivo de los de Cuco Ziganda, hace imposible que las ocasiones para los delanteros lleguen.
Los datos más significativos a favor de Weligton se contabilizan en los balones ganados. Bermejo sólo pudo arrebatarle, y no con mucha claridad, tres acciones por las más de diez que logró salir airoso el brasileño. Además logró sacar una amarilla a Bermejo.
