El PP de Chiclana asegura que "el PSOE es el responsable del caos urbanístico por su pésima gestión"

El PP de la localidad gaditana de Chiclana ha asegurado hoy que "el PSOE es el responsable político del caos urbanístico en el municipio por su mala gestión", porque no entienden "cómo es posible que los socialistas muestren satisfacción después de que la fiscalía de Cádiz asegure que han gestionado mal el urbanismo de Chiclana, y por lo tanto, son los responsables políticos".

Desde el PP manifestaron en un comunicado que "si alguien le ha hecho daño a la ciudad es el PSOE del alcalde de Chiclana, José María Román, que con su mala gestión en urbanismo ha provocado el caos urbanístico y como consecuencia de ello surge ahora todo el problema que existe con la Oficina de Regularización de Viviendas de las Areas de Gestión Básica".

En este sentido, los 'populares' consideraron que "si se hubiera controlado el urbanismo desde el principio, ahora no se tendría este problema social, con muchas familias teniendo que hacer frente a unos pagos imposibles para su economía, con los pozos contaminados y con muchos niños con problemas de salud".

Al respecto, el PP afirmó que "Chiclana es mundialmente conocida por su nefasto urbanismo y quienes lo han gestionado de manera absolutamente ineficaz ha sido el PSOE, por lo que si tuvieran un mínimo de vergüenza y de amor por la ciudad, dimitirían unos detrás de otros".

Por otra parte, los 'populares' declararon que "Román hace daño a la ciudad, al batir el récord de engaños a los ciudadanos y capaz de seguir engañándolos con tal de tener el poder". Además, "los ciudadanos no son tontos y recuerdan a la perfección cómo actuó el PSOE mientras estuvo en la oposición, quitándole a la localidad las inversiones de otras administraciones, promoviendo manifestaciones como la de 'Chiclana se hunde', acosando a miembros del anterior gobierno con asuntos familiares, culpando de la crisis económica al ex alcalde Ernesto Marín y engañando a los parados de la ciudad".

Por ello, el PP invitó al PSOE a hacer "un profundo análisis de conciencia y plantearse seriamente la realidad de un partido desgastado, cuyo táctica política es vender mil veces los mismos proyectos durante años, incapaz de exigir a otras administraciones lo que corresponde a los chiclaneros y de plantear ideas nuevas que generen empleo y que ilusionen a la ciudad, y encima con una importante crisis interna en el partido".