Por una nueva izquierda
Actualizado: GuardarEl socialismo democrático ha demostrado en toda su historia su flexibilidad. En 1988, Fukuyama en su conferencia en la Universidad de Chicago proclamo el fin de la historia no como el fin de las ideologías, sino como la victoria sin paliativos del liberalismo político y económico. El triunfo de la derecha alemana nos posiciona mucho más en la necesidad de una izquierda europea, una nueva izquierda que se postule en lucha contra los principios de Milton Friedman y sus secuaces de la Escuela de Chicago que tanto daño ha hecho a la humanidad.
En una sociedad donde los más fuertes duran y prosperan y los trabajadores se ven condenados al desempleo, donde los poderosos se han hechos más fuertes creando una crisis artificial, duradera e impredecible para el conjunto de los mortales, a excepción de ellos mismos, con sus recetas de reducción de impuestos, del libre mercado, de la privatización de los servicios, de los recortes sociales, de la liberalización y la desregulación.
En Alemania los resultados nos traen dos posibles lecturas, una la amarga de la socialdemocracia, otra el fin de una izquierda que ha abrazado las leyes del mercado y el resurgir de una nueva que desde la flexibilidad y el compromiso avance en el socialismo democrático. Pedro Narváez y Juan Manuel Canle. Cádiz