El Sindicato Independiente de Policía Local llevará a Pilar Sánchez a los tribunales

El malestar del Sindicato Independiente de la Policía Local de Jerez (SIP) parece no tener fin. Ayer anunció en una asamblea que la continuidad de las movilizaciones «es necesaria», ya que «hasta ahora no ha habido ninguna mejora», según destacó Miguel Ángel Periñán, representante sindical del cuerpo.

De esta manera, el colectivo ha decidido emprender acciones judiciales contra la alcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez. Según miembros del SIP, la máxima mandataria de la ciudad es responsable de la situación en la que se encuentran, por lo que anuncia que se reunirá puntualmente en la puerta del Ayuntamiento durante los sucesivos plenos hasta que solucionen los problemas de medios técnicos, la paralización del cuadro horario y el cumplimiento de la regulación de los puestos de trabajo.

Otras medidas

Asimismo, este grupo también iniciará una campaña informativa dirigida a los ciudadanos para que conozcan «la situación en la que se encuentra el área de Seguridad dirigida por María del Carmen Martínez».

Y es que los funcionarios han explicado que sus reivindicaciones se deben a «la falta de claridad y al incumplimiento de las promesas realizadas por la delegada de Seguridad», por lo que piden «que cumplan con los presupuestos aprobados y que dirija el dinero que corresponde a esta materia».

Antecedentes

Cabe recordar que ya en la primera quincena del mes de septiembre el SIP llevó a cabo varias protestas con la finalidad de exigir al Ayuntamiento de Jerez que cumpla con su compromiso de aumentar y mejorar los medios, materiales y humanos, con los que cuenta el cuerpo de la ciudad actualmente.

Ya son muchos los meses en los que esta disputa se mantiene a pesar de algunas treguas dadas. Y es que el sindicato ya denunciaba entonces que sigue esperando la modernización prometida de la Jefatura de la Policía Local.

En este sentido, el pasado 13 de septiembre tuvo lugar una concentración protagonizada por los miembros de este sindicato y ya entonces se anunciaba que a finales de ese mismo mes se celebraría una asamblea en la que se decidirían las medidas de presión a adoptar ante un conflicto que no tenía visos de solucionarse a corto plazo.

Los agentes argumentan su exigencia en el hecho de que la Policía Local se encuentra «en un estado de desorganización, anarquía e ineficacia», recordando que el Cuerpo continúa a la espera de que se invierta lo presupuestado en recursos muy necesarios. Además, los agentes continúan haciendo preguntas dirigidas al gobierno local como: «¿Cuándo va a invertir en seguridad?» o «¿cuándo van a dar soluciones a los problemas y dejar de poner parches?»