Valioso empate para el Industrial en Sangonera

El Jerez Industrial consiguió un valioso empate en su visita a El Mayayo de Sangonera, que permite a los de Nico Sosa prolongar la racha positiva, después de haber sumado una victoria en Águilas y sendos empates caseros ante Ceuta y Ciudad Lorquí en las tres jornadas anteriores.

No obstante, hay que resaltar que el duelo se celebró en medio de una piscina, en la que, aliados con la fortuna, los blanquiazules dieron las gracias al estado del terreno de juego porque los locales dispusieron de las mejores ocasiones para haber logrado algún gol en el partido de ayer.

Y es que con la excepción del empate logrado, todo le salió mal. No llegaron a la meta contraria y solamente el cuadro murciano fue capaz de crear peligro con cierta consistencia.

El equipo visitante fue, por momentos, un títere sobre el agua. Lo intentaron como pudieron pero su conjunción sobre el terreno de juego fue lamentable, exceptuando un par de ocasiones casi consecutivas en el ecuador de la primera mitad. El resto fue un monólogo permanente de un equipo local que tuvo hasta siete ocasiones claras de gol, en el cómputo global del choque. Sobre todo por parte de Perona, que fue un aliado más del equipo jerezano para hacerse con ese punto que sabe como a tres.

El atacante valenciano marró por seis veces ante la meta de Alberto. Pero por entidad de los remates, lo más peligroso fue un disparo de Crespo, a tres minutos del descanso, que se estrelló en el larguero blanquiazul.

Con diez

En la reanudación las cosas se pusieron aún más oscuras para el Jerez Industrial con la expulsión de Jorge Herrero, cuando apenas se llevaban dos minutos del segundo tiempo.

Con diez jugadores sobre el tapete, el equipo visitante apeló aún más a la fuerza defensiva. Los jugadores jerezanos se atrincheraron atrás y mantuvieron su fuerza intentando salir a la contra y salvando los muebles como podían. Achicó balones que, nunca mejor dicho, servían para capear el temporal, pues la segunda parte fue una sucesión de ocasiones del Sangonera.

Antes del carrusel de ocasiones, el delantero local Perona reclamó un posible penalti en el minuto 61.

Poco más tarde el propio punta echó fuera un balón, tras cabecear la pelota en boca de gol, que se le marchó alta y en el minuto 75 volvió a ser el protagonista al desaprovechar un mano a mano ante el portero Alberto.

Para suspenderlo

Al final empate a cero goles en un encuentro que nunca se debió disputar por las condiciones tan lamentables del terreno de juego que presentó El Mayayo en la mañana de ayer.

Entre charcos y barro ambos equipos hicieron lo que pudieron para jugar al fútbol, pero en especial el Sangonera, que lamentará durante toda la semana haberle perdonado la vida al Jerez Industrial. Con el reparto de puntos los jerezanos suman 9 puntos mientras que los murcianos se mantienen en los puestos de privilegio, con 11.