El Gobierno renuncia a subir el IVA a productos de primera necesidad
Elena Salgado asume que deberá «hacer pedagogía» para lograr que los ciudadanos lleguen a comprender el aumento fiscal
MADRID Actualizado: GuardarEl Gobierno confirmó ayer el inminente aumento del IVA, pero matizó que quedarán exentos de esa subida los artículos de consumo ahora gravados al tipo súper-reducido del 4%, que afecta a bienes y servicios considerados de primera necesidad. La vicepresidenta económica, Elena Salgado, que ejerció de portavoz del Ejecutivo, confirmó que el «núcleo» de la reforma fiscal prevista, que entrará en vigor en 2010, consiste en un incremento de la tributación indirecta de la mayoría de productos y de las rentas del capital.
Pan, leche, huevos, frutas y hortalizas y viviendas protegidas son algunos artículos incluidos en ese listado de bienes de primera necesidad que elabora Bruselas con la conformidad unánime de los estados miembros de la UE. Esos bienes de consumo y algunos servicios especiales como la reparación de coches de minusválidos y la adaptación de vehículos para el transporte de discapacitados, se librarán de la subida general del IVA, que el Gobierno piensa dar a conocer el próximo día 26 junto con el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado para el año próximo.
Elena Salgado dejó también abierta la posibilidad de que la subida del principal impuesto al consumo afecte a los artículos que ahora tributan al tipo intermedio, también llamado reducido, del 7%. En esta categoría están, por ejemplo, gafas y lentillas, determinado material e instrumental agrícola y sanitario, semillas, animales, vegetales y derivados destinados a la producción de alimentos.
La responsable de Economía insistió tras la reunión del Consejo de Ministros que no entra en sus planes «ninguna modificación de tipos» que pueda encarecer «productos de primera necesidad». Además, estimó que cuando el Ejecutivo haga público su nuevo plan fiscal para 2010 «será necesario hacer un gran ejercicio de pedagogía y explicación», al objeto de «hacer entender» a los contribuyentes que se trata de una medida necesaria y coyuntural, que pretende incrementar la recaudación para atender a necesidades sociales. «A nadie le gusta que le suban los impuestos», admitió.
Salgado echó mano de las políticas tributarias de algunos socios europeos para justificar la suya.